Especiales Semana

El traductor

Francisco Moreno, indígena de la etnia sikuany, es el puente entre dos culturas.

18 de junio de 2011

A la Alcaldía del municipio de Primavera, en Vichada, entra un hombre de baja estatura y rostro amable, caracterizado por un pequeño bigote. Se acerca a la secretaria, la saluda y le entrega unas hojas escritas a mano que lleva en su mochila. La secretaria recibe las hojas y se dispone de forma inmediata a transcribir su contenido en el computador.

Se trata de Francisco Rincón Moreno, un descendiente de la etnia sikuany, nacido en Puerto Gaitán hace 52 años. Desde que llegó a Primavera se ha mantenido en contacto con los integrantes de su etnia y los apoya para hacer todas las diligencias que necesiten en el pueblo, desde radicar una carta o solicitar un servicio hasta hacer los trámites de salud.

Dado que muchos solo hablan su lengua nativa y no saben escribir en español, la labor de Rincón es muy importante para los integrantes de su comunidad. "Soy un hombre sencillo, orgulloso de mis hijos, de mi esposa y de mi cultura", dice Francisco, quien a pesar de haber hecho solo hasta cuarto de primaria hace todo el esfuerzo por servir a su gente.