Especiales Semana

El tucán de los Andes

En los bosques andinos reside esta pequeña ave multicolor. Una mirada detallada a esta especie que se encuentra en vías de extinción.

11 de diciembre de 2010

Sobre la cumbre de la cordillera Central de la región Andina, donde un manto de nubes cubre todo y el ambiente es excesivamente húmedo y frío, vive un tucán de apenas 47 centímetros de longitud. Su plumaje laxo, de apariencia aterciopelada y vistosa, se acomoda perfectamente a esta zona geográfica que atraviesa gran parte del territorio colombiano y cuenta con una de las mayores biodiversidades del planeta. Sin embargo, a causa de la destrucción y fragmentación de esta selva tropical, el Andigena hypoglauca, más conocido como el tucán pechigrís o terlaque andino, está en peligro de extinción.

Perteneciente a la familia Andigena, compuesta por cuatro especies de tucanes que viven en los Andes, el tucán pechigrís ha sido encontrado y observado por científicos y ornitólogos nacionales e internacionales en los departamentos de Caldas, Cauca, Huila, Nariño, Quindío, Risaralda y Tolima. Como su nombre lo indica, en él prevalece el color gris, así como los tonos pardos y azulosos. Esto lo diferencia del tucán amazónico, mucho más familiar para la gente del común, en el que predominan el amarillo, el rojo y el negro.

Este tucán se alimenta principalmente de frutas. El pechigrís consume hasta 43 especies de ellas en la región del alto Quindío. En el Parque Nacional Natural Los Nevados, por ejemplo, es común verlo comiendo guayabos de monte. Humberto Álvarez López, presidente de la Asociación Colombiana de Ornitología, afirma que estos tucanes "son reconocidos como 'eslabones móviles'. Esto quiere decir que son especies importantes para la reproducción de las plantas, pues al alimentarse de frutos contribuyen a dispersar las semillas y esto regenera naturalmente los bosques. Además, son sembradores de palmas de cera y de árboles tan apreciados como los cominos, entre muchas otras especies".

El tucán pechigrís se presenta en áreas bastante grandes, según las observaciones realizadas por Luis Miguel Renjifo, vicepresidente de la Asociación Colombiana de Ornitología y profesor de la Facultad de Estudios Ambientales y Rurales de la Pontificia Universidad Javeriana, en Bogotá. Habita en bosques maduros, principalmente, y se encuentra con mucha más frecuencia entre los 2.700 y 3.000 metros de altura. La densidad de población de la especie es de aproximadamente 15,4 individuos por kilómetro cuadrado.

Esta cifra es variable, a lo que se añade que hoy día esta especie ha sufrido una reducción del 61 por ciento de su hábitat natural. Al respecto, Padu Franco, director ejecutivo de la Wildlife Conservation Society (WCS) en Colombia, explicó que "en el caso específico del tucán pechigrís, la pérdida de su hábitat original se generó por el aumento de la frontera agropecuaria y la urbanización hasta mediados del siglo XX. Sin embargo, en la actualidad, estos fenómenos siguen causando impacto a una escala local, y en algunas regiones la extensión de cultivos ilícitos es un factor poco evaluado. La viabilidad de las poblaciones de esta especie dependerá en cierta forma de la protección de los remanentes de bosques en los Andes". Es evidente que el tucán pechigrís es una pequeña pero valiosa muestra de la riqueza que yace en los Andes y en el territorio colombiano en general.