Especiales Semana

En Colombia están 700 multinacionales

El país ha recibido 37.378 millones de dólares en Inversión Extranjera Directa en los últimos 11 años. La necesidad de integrarse al mundo y crecer hace de la presencia de las multinacionales algo deseable para el desarrollo.

Luis Fernando Gutiérrez
28 de octubre de 2006

Tal parece que los colombianos tendrán que se acostumbrar a que el eslogan “orgullosamente colombiana” desaparezca de varias de las que hasta hace poco fueron las empresas más representativas del país. Hace unos años era impensable que Bavaria o Avianca quedaran en manos de inversionistas extranjeros. Hay quienes dicen que sólo falta que Juan Valdez se vuelva rubio y de ojos azules y que cambie la mula Conchita por un purasangre inglés.
Lo cierto es que Colombia no ha sido ajena al fenómeno de la globalización. Hoy se habla de tratados de libre comercio, de integración de mercados, y el concepto de empresas multinacionales se integra más al día a día de un país que busca crecer e integrarse al mundo. El impacto de las multinacionales en la economía colombiana y en la cultura es evidente: en 2005, la Inversión Extranjera Directa (IED) en Colombia llegó a 10.378 millones de dólares, lo cual representó un crecimiento de 227 por ciento frente a los 3.117 millones de dólares que se invirtieron en 2004.
El año pasado, de acuerdo con un estudio realizado por la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (Unctad), la colombiana fue escogida como la quinta economía más favorable para la inversión en América Latina, después de Brasil, México, Argentina y Chile. Adicionalmente, en el reporte Doing Business 2005, del Banco Mundial, el país ocupó el segundo lugar entre 145 economías en mejoras en el clima de los negocios por regulaciones y políticas que incentivaron la inversión, la productividad y el crecimiento.
De acuerdo con la información del Banco de la República, la inversión extranjera directa acumulada en Colombia, entre 1994 y 2004, ascendió a 27.300 millones de dólares. Buena parte de esta inversión provino de América del Norte, Europa, América Central y el Caribe. Estados Unidos registró el más alto nivel de inversión en el país, con 16 por ciento; le siguieron España, con 14 por ciento, y Panamá, con 13 por ciento; Holanda (5 por ciento); Reino Unido (3 por ciento); y de América Central y el Caribe: Islas Caimán (11 por ciento), Islas Vírgenes (10 por ciento) y Bermuda (7 por ciento).
Un informe reciente de Proexport mostró que en Colombia tienen presencia cerca de 700 multinacionales, siendo los sectores que recibieron más flujos en 2005 manufacturas, minas y canteras, y petróleo. El país que más invirtió fue Inglaterra, seguido de Estados Unidos; luego estuvieron México, España y Holanda.
En 2006, la situación continúa por el mismo camino. Según el Banco de la República, durante el primer trimestre la inversión extranjera en el país fue de 978 millones de dólares, 6,8 por ciento más que en el mismo período de 2005. Y entidades como Fedesarrollo estiman que al finalizar el año, el total estará cerca de los 6.200 millones de dólares.
La presencia de jugadores globales ha implicado la consolidación en la industria, la tendencia hacia la especialización y, sobre todo, hacia la mayor profesionalización. Las compañías locales tuvieron que entrar en un proceso de renovación tecnológica, inversión en recursos humanos, mejoras en competitividad y productividad, y reducción de gastos, para hacerse rentables y competitivas. Esto incluyó mejorar las metodologías de trabajo, especialización y segmentación de mercados y búsqueda de nuevos canales. Todo esto permite responder a un accionista que exige mayor retorno y ofrecer un mejor servicio al cliente.
Una de las preocupaciones de los inversionistas externos en el país era la inestabilidad jurídica, lo cual se mejoró con la Ley 963 de 2005, creada para garantizar la estabilidad jurídica de las inversiones nacionales y extranjeras en Colombia. La norma prevé que mediante un contrato con el Estado, el inversionista pueda asegurar que las normas que, son determinantes para su inversión (incluidos impuestos de renta y al patrimonio) no le serán cambiadas por un período que oscila entre tres y 20 años, dependiendo de lo pactado con el gobierno.
Otro de los aportes importantes de las multinacionales ha sido generar conciencia alrededor de la importancia de innovar. Hoy, las multinacionales que más crecen son aquellas que han adoptado la innovación como una actitud. Citigroup, Royal Dutch/Shell, P&G y Colgate-Palmolive. Según el estudio Innovation & Growth: a Global Perspective, realizado por el consultor Trevor Davis de la firma Pricewaterhouse Coopers, la innovación es el factor que más distancia a las empresas que crecen de aquellas que no lo hacen. Otra investigación reciente del Industrial Research Institute, con sede en Washington, encontró que un incremento de 10 por ciento en nuevos productos genera un aumento del 2,5 por ciento en los ingresos.

Testimonio de éxito
Hace pocos meses, Proexport recogió el testimonio de la banquera de inversión colombiana Violy McCausland alrededor de la importancia de la inversión extranjera en Colombia: “Atraer inversión extranjera directa en Colombia depende, en gran medida, de que se logre cerrar la brecha que separa la percepción que se tiene del país, de su verdadera realidad”. Paradójicamente, mientras que la percepción que los mercados internacionales tienen del país suele ser negativa y subraya sobre todo los problemas de seguridad y de narcotráfico, la experiencia de quienes han invertido en el país ha sido positiva.
Sobre la base de un ámbito macroeconómico sano y fuerte, Colombia ha demostrado durante las últimas décadas, a través de un tratamiento legal y jurídico igualitario para todos los inversionistas extranjeros, que la experiencia de invertir en el país es exitosa. Compañías como Coca-Cola, Nestlé, Colgate-Palmolive, Gillette, Nabisco, Quaker y Unilever llevan más de 45 años en el país y tienen tras de sí una larga historia de éxitos acumulados, además de gozar de una presencia importante en el mercado. En la actualidad, casi 100 compañías de las listadas en Fortune 500 operan en Colombia.
Hacia el futuro, Colombia ofrece oportunidades de inversión, por varias razones: el país presenta uno de los ambientes macroeconómicos más estables de la región, administrado a través de un Banco Central independiente, y cuenta con sólidas reservas internacionales y con una administración fiscal gubernamental disciplinada. Los bajos índices de inflación sostenidos durante los últimos cinco años y el tipo de cambio flotante que logró sobrevivir a la reciente crisis monetaria latinoamericana garantizan la afluencia futura de capital extranjero al país. Colombia se encuentra ad portas de una nueva era, que se caracterizará por una afluencia importante de inversión extranjera, afluencia que generará crecimiento económico y desarrollo general para el país.