Exposición A todo motor

A veces, en medio de las atiborradas vías bogotanas, un último modelo se asoma y arranca suspiros a los amantes del mundo de los carros. Muchos quisieran que no doblara tan rápido la esquina o que no se perdiera detrás de un bus o una volqueta para verlo un rato más, para apreciar su línea, su color y su diseño.

Los espectadores se ven obligados a contentarse con buscar después un panorama más apropiado que el de las enrevesadas avenidas de la capital: lo más común es que tengan que limitarse a las revistas especializadas. Lo mismo ocurre, sin duda, en las demás ciudades del país.

Sin embargo los amantes de los carros, los compradores regulares y todas las empresas y personas relacionadas con la industria automotriz encontrarán por 10 días, del 18 al 28 de noviembre, el espacio propicio para apreciar los últimos modelos de las principales marcas nacionales e importadas: el IX Salón Internacional del Automóvil, el evento más importante de esta industria, organizado por Corferias.

En el evento se darán cita los diferentes sectores de una industria que en los últimos años ha mostrado un crecimiento bastante significativo. Así, para este año se presentará una amplia exposición que contará con la presencia de 110 expositores de más de 37 de las empresas más reconocidas de automóviles, las que además de traer sus últimos modelos para los 80.000 visitantes que se esperan, representarán sectores como el de vehículos comerciales, clásicos y antiguos, y productos relacionados con el sector, en un espacio de 100.000 metros cuadrados distribuidos en 18 pabellones y ocho áreas libres (ver plano).

La feria estará abierta de 10 de la mañana a 8 de la noche, y el precio de la boleta será de 13.000 pesos para adultos y 6.500 pesos para niños menores de 12 años.

La historia del Salón Internacional del Automóvil se remonta a un espacio dentro de la Feria Internacional de Bogotá. Cuando esta última tuvo la necesidad de especializarse sólo en el sector de maquinarias, los pertenecientes a otras industrias adquirieron independencia y forjaron sus propios espacios: así nació este Salón, que este año llega a su novena edición y que se ha convertido en uno de los mejores eventos del sector en el ámbito latinoamericano.

Para Roberto Vergara, subdirector comercial de Corferias, "no había un mejor momento para que iniciara el evento: a raíz de la apertura económica del gobierno Gaviria los aranceles para la importación de vehículos habían bajado ostensiblemente y las principales marcas estaban entrando al país, y como la gente ya estaba cansada de las marcas de siempre, encontramos la coyuntura perfecta".

Estos factores contribuyeron a que desde su inicio el Salón se convirtiera en un éxito en cada una de sus ediciones (ver recuadro) y a que poco a poco se fuera dando especial atención a la industria por todos los públicos involucrados. Así lo ratifica Guillermo Acevedo, gerente de marketing de Metrokia, distribuidora de Kia en Colombia, cuando se refiere a que "desde sus inicios ha sido un actor protagónico para consolidar una nueva cultura automotriz en Colombia porque ha permitido acercar las principales marcas al consumidor".

No obstante, la crisis económica de 1999 amenazó con su extinción. Las empresas vieron caer sus ventas en más de la mitad y el Salón tuvo que cerrarse por tres años, entre 1999 y 2001, hasta cuando las condiciones fueron más favorables. Las directivas de Corferias decidieron darle una periodicidad bienal. Según Vergara, lo que se busca con este cambio es que "las empresas tengan más tiempo para preparar sus novedades y que haya, en ese sentido, una mayor gama de productos disponibles". El éxito fue tal que desde entonces el Salón ocupa en un sitio de privilegio entre los eventos feriales de Colombia y de la región.

Y si se habla de éxito es, sobre todo, por los buenos resultados que obtienen los expositores. Para Catalina Dugand, directora de mercadeo y relaciones públicas de Colwagen S.A., que distribuye los modelos de la marca Audi para Colombia, este evento ofrece la coyuntura de que asiste gran cantidad de gente que lo espera todo el tiempo para conocer los carros y tomar decisiones. Según ella, "eso nos permite utilizar la feria como plataforma para, además de incrementar las ventas, posicionar la marca y alcanzar el objetivo de ser los líderes de este segmento de la industria. Además, en los años en los que Corferias hace el evento, nuestro nivel de ventas aumenta ostensiblemente, al igual que nuestras proyecciones. Por eso esperamos el Salón para lanzar las novedades"

Es tal el reconocimiento del Salón que entre las grandes novedades de esta versión está la participación por primera vez de las importantes marcas italianas Ducati, Maserati y Ferrari. Jorge Florián, representante de las firmas para el evento, dice que su participación "tiene que ver con ciertos aspectos como que Ferrari está interesado en retomar el mercado colombiano y Maserati quiere mostrar unos productos que según sus estudios corresponden al patrón de consumo en Colombia".

Por razones como esta se hace el evento más importante del país en materia automotriz. Se estiman, según las proyecciones, que se harán más de 50 lanzamientos de todas las marcas debido sobre todo a que este año el sector ha sido muy dinámico.

Y, para quienes piensan que el Salón es un escenario destinado sólo a ser un área de exposición y venta de vehículos, conviene aclarar que es también el espacio en el que se presentarán las diferentes novedades en productos y servicios para automóviles, entre los que se destacan novedosos sistemas de lavado que no requieren agua y ayudan a preservar el medio ambiente, accesorios para mejorar el rendimiento de los vehículos y muestras de la conveniencia de cambiar el uso de la gasolina por el gas natural. Además contará con un pabellón especializado en el sector de vehículos comerciales en el que participarán marcas tan reconocidas como Mack, Ford y Chery.

También sirve como marco para la celebración de un sinnúmero de eventos que convocan a los aficionados de temas relacionados como el sonido, las competencias y el gusto por los carros antiguos.

Todos estos elementos han hecho del Salón un evento exitoso. Y, aunque después de 10 días los amantes de los carros tendrán que anhelar que el último modelo que se asoma en la vía dure unos pocos segundos en su órbita visual, seguramente muchos de ellos lo harán desde la comodidad del suyo.