Gerencia y Oficinas

Más allá de la razón
QUIEN CREA QUE LA RAZON ES LA MEJOR consejera en materia de gerencia está fuera de onda. Recientes estudios de investigadores norteamericanos demostraron que en un alto porcentaje los directivos de varias empresas en el mundo se dejan guiar más por las corazonodas que por los procesos racionales del pensamiento.
Por eso, frente a un grupo de asesores que se inclinan por la opción que la razón indica, el alto ejecutivo cierra sus oídos a los consejos de los sabios para seguir lo que le dicta la intuición.
Una situación que ha conducido a especialistas en la materia a concluir que no sólo de razón vive el hombre sino de aquellos pálpitos que produce su corazón.
El conocido científico Albert Einstein atribuía su teoría de la relatividad a un destello de su visión y no al frío racionalismo del investigador objetivo que vive de los datos del laboratorio.
Aunque su cerebro era continuamente nutrido con estudio y reflexión, Einstein reconocía que