Especiales Semana

Liderazgo

26 de septiembre de 2009

Hay tantos libros, seminarios, conferencias y frases sobre liderazgo, que parecería que es algo que está al alcance de todos. Sin embargo, aunque en la sección de autoayuda de la librería más cercana haya algún manual inspirador sobre cómo convertirse en líder, lo cierto es que este tipo de personas sigue siendo más la excepción que la regla. En una cancha de fútbol hay 11 jugadores, pero sólo uno de ellos es el capitán. Millones de personas votan en unas elecciones para elegir a un solo presidente. Un batallón tiene cientos de soldados, pero pocos coroneles y aun menos generales.

Lo anterior, claro está, no quiere decir que el líder sea un ungido por la providencia, ni que sea un ser humano predestinado a encabezar cualquier proyecto. Los líderes también pueden formarse y surgen de la combinación de varios factores, como el carisma, la educación, la experiencia, la necesidad y la creatividad, entre otros. La mayoría de los líderes combina alguna o todas esas características en su historia personal. Pero, por otra parte, también hay líderes sin carisma o con poca educación, o que carecen de experiencia y se ven arrojados a ponerse al frente de algo cuando el momento lo exige.

Queda claro, entonces, que no hay una receta única para el liderazgo. Lo único que tienen en común todos los líderes es que cuando surgen, siempre encuentran seguidores, que pueden marchar ciegamente detrás de su guía o que pueden cuestionarlo.

Los líderes están en todos los campos de la actividad humana: en la política, en la empresa, en el deporte o en entornos más cercanos, como la familia. En esta edición, SEMANA repasa algunos casos de liderazgo presidencial de la historia política de Colombia, les pregunta a los directores de las grandes compañías qué les ha permitido estar en la punta de sus rubros, y analiza las características de los líderes y los liderazgos que nos rodean.