Especiales Semana

"Pavimente, Alcalde, pavimente"

Barrios a la Obra es uno de los programas más queridos por los habitantes de los sectores pobres de Barranquilla.

16 de octubre de 2010

En 2007, en medio del invierno y en plena campaña electoral por la Alcaldía de Barranquilla, la gente le decía al candidato Alejandro Char: "Pavimente, Alcalde, pavimente, no queremos seguir caminando sobre el barro". Esa petición reiterada se convirtió en la propuesta central de su promesa de gobierno y, tras su elección, en un mandato que Char ha cumplido a través del programa Barrios a la Obra.

Desde el primer día, y durante los casi tres años de administración, se han construido vías, particularmente en los barrios más pobres, y se ha reconstruido una gran cantidad de calles y arterias que se encontraban en mal estado.

En 2008 se construyeron 50 kilómetros-carril, con una inversión de 20.000 millones de pesos; en 2009 se dobló el número de kilómetros construidos, con 110 kilómetros, a un costo de 92.500 millones de pesos, y en 2010 van 208 kilómetros, a un costo de 126.500 millones de pesos. Es decir, hasta el momento van construidos 368 kilómetros-carril de vías, que con 220 kilómetros que están presupuestados para 2011 suman 588 kilómetros-carril en cuatro años de gobierno.

Barrios a la Obra

El sistema de construcción de vías en los barrios ha sido en parte la clave del éxito del programa, que está cimentado en la participación de las comunidades. El procedimiento es breve: el Distrito abre una convocatoria que dura tres meses, los vecinos inscriben sus vías con la descripción geográfica y la longitud, y el Distrito verifica la información.

Para que un proyecto sea escogido, es necesario que los interesados hayan consignado en una cuenta del comité de la vía el 4 por ciento del valor de la obra, que es de 3.300.000 pesos por cada 100 metros. Un kilómetro de vías tiene un valor de 1.000 millones de pesos, y los vecinos recogen el dinero mediante bingos, rifas, verbenas, paseos, y si no les alcanza, o si prefieren agilizar la obra, cada fin de semana recogen por cada casa 5.000 pesos. Una vez conseguidos los recursos, los vecinos que muestren la hoja de consignación de su porcentaje del costo de la obra serán los primeros beneficiarios de la vía. Con este mecanismo se han construido centenares de calles y andenes en barrios donde no se conocía el concreto.

Uno de los más beneficiados ha sido La Sierrita, donde se puso en marcha la prueba piloto, lo que generó confianza entre sus habitantes. Pero el Distrito también le ha dado prioridad a otros barrios por razones de conectividad y movilidad.

"Es un hecho sin precedentes en la ciudad", afirma el secretario de Infraestructura, Rafael Lafont, quien ha estado al frente del programa desde el primer día de la administración Char. A manera de comparación, el gobierno anterior había propuesto pavimentar 30 kilómetros, los cuales no se construyeron, o si se iniciaron, no fueron terminados, con excepción de la Circunvalar, en donde quedó un kilómetro construido, mientras que la administración actual lleva ocho kilómetros en la misma vía, una importante arteria para la competitividad, pues comunica el norte con el sur de la ciudad por todo el occidente y empalma con las principales carreteras que comunican a Barranquilla con Santa Marta, Cartagena y el interior del país.

Es una vía importante para la competitividad de la ciudad, pues su ampliación permite un flujo más rápido hacia la zona industrial y comercial de la Vía 40, la zona portuaria, y hace más atractiva la expansión industrial y comercial hacia el occidente de Barranquilla, zona donde se construyen nuevas zonas francas industriales y logísticas.

El alcalde Char sostiene que si bien la ciudad tiene otros problemas de movilidad, la circulación vehicular de Barranquilla mejorará mucho con los nueve kilómetros actuales de la Circunvalar, más los que ejecutará el gobierno el próximo año para empalmar con el Bulevar de Simón Bolívar y el puente Laureano Gómez, desde donde se desprenderá la construcción de cinco kilómetros del Corredor Portuario y los 590 kilómetros de Barrios a la Obra. En estos tres años el programa ha generado empleo temporal para unas 30.000 personas.

Además de lo anterior, en el mes de julio arrancó el Sistema Integrado de Transporte Transmetro, que cobrará cada vez mayor importancia para la ciudad, a pesar de que la chatarrización va más lento de lo esperado y apenas está circulando el 30 por ciento de los buses del nuevo sistema. Aunque los empresarios y usuarios piden más celeridad y hay voces pesimistas, la administración es optimista, pues ya han salido de circulación 200 buses y se espera que en marzo de 2011 Transmetro esté transportando 400.000 personas diariamente.

Un tema que preocupa a los barranquilleros y a la administración, pues paraliza a la ciudad, tiene que ver con los arroyos. El secretario Lafont afirma que ya contrataron los estudios para eliminar? los arroyos de las calles? 92, 84, 76, 62 y 58, que esperan tener los diseños y los recursos en dos meses y a fines de 2011 haberlos eliminado mediante la construcción de rejillas a ras de la calle, para capturar el agua y enviarla a través de un alcantarillado pluvial al río Magdalena.

El Alcalde pide paciencia a los habitantes de Barranquilla en el tema de movilidad y afirma que ya están diseñando, con el gobierno nacional, una segunda fase del sistema Transmetro integrado por la carrera 30, que costaría un billón de pesos. Esta fase saldría del centro de Barranquilla y cubriría los municipios de Soledad y Malambo, pues no hay que olvidar que Barranquilla es el eje de un área metropolitana de dos millones de habitantes.