Especiales Semana

“Pronóstico reservado”

Nadie sabe a ciencia cierta si el nuevo carro de Montoya aguantará durante la carrera de Miami. Si todo sale bien el colombiano será nuevamente protagonista en la temporada 2000.

Cesare Mannuci
17 de abril de 2000

Se comienza de nuevo. Entre pocas certezas y muchas dudas. Desde el día en que Montoya se convirtió en campeón en Fontana han pasado sólo cinco meses y sin embargo muchísimas cosas han cambiado.

No tiene más el motor Honda, vencedor de los últimos cuatro campeonatos de Cart, siempre con el equipo Ganassi, y no estará más Morris Nunn, el técnico inglés que tantos méritos ha tenido en el proceso de maduración del piloto colombiano.

La Cart comienza con cosas nuevas, quizás demasiadas. En los entrenamientos de invierno Montoya siempre ha sido protagonista, dejando entrever un gran potencial técnico, incluso con el motor Toyota. Pero el automovilismo es el deporte de las dudas, de las sospechas. Hay quienes han puesto en duda la regularidad del coche del equipo Ganassi. Sin embargo, lo cierto es que Juan Pablo Montoya es hoy el piloto más veloz, más determinado y más completo entre todos aquellos que corren en la Cart, pero el tránsito del motor Honda al Toyota reduce sin duda su posibilidad de ser campeón en 2000, también debido a que Toyota está preparando su entrada en la F-1 con un auto enteramente construido por ellos, y este programa tiene el riesgo de quitarle potencial técnico y económico al proyecto Cart.

La increíble temporada de Montoya del 99, siete victorias y un título conquistado, mostrando siempre una gran superioridad, no puede ser olvidado, pero sin duda el escenario cambió. Montoya no es de todos modos el único que tiene dudas a su alrededor. ¿Saldrá bien Dario Franchitti y se recuperará física y sicológicamente del tremendo accidente que tuvo en Homestead durante los entrenamientos de febrero? También hay dudas en Penske, que abandona los chasises que construía, y los motores Mercedes, para utilizar un Reynard propulsado por Honda. Para el equipo Penske conducirán los brasileños De Ferran y Castro-Neves y la rivalidad entre los dos se prevé que será ‘muy candente’.

Los entrenamientos privados han mostrado una superioridad técnica del motor Ford. Los equipos Rahal, con Max Papis y Kenny Brack, y el equipo Newman-Hass,con Michael Andretti y Christian Fittipaldi, parecen por el momento los más acreditados para ser protagonistas.

¿Será el último año de Montoya en Estados Unidos? Probablemente sí. Es claro que el futuro escenario de Montoya será la F-1, no necesariamente con Williams. Montoya tiene un contrato con la escuadra inglesa que en 2001, terminada la fase de desarrollo del motor BMW, volverá seguramente a ser protagonista. A Montoya le interesa Williams, pero también otros equipos, y todos se sorprenden por su trabajo del 99. También, si no pudiera conquistar de nuevo el campeonato Cart este año, para Montoya siempre habrá de todos modos un futuro de protagonista.