Especiales Semana

¿Quién le teme a la bolsa?

Apenas doce de las 100 empresas más grandes del país transaron sus acciones en el mercado de valores el año pasado. En 2006, la lista se reduce a diez., 78533

23 de abril de 2006

¿Hay alguien a quien le quede duda de que 2005 fue el año de las acciones? Las cifras lo dicen todo: el Índice General de la Bolsa de Colombia (Igbc), que mide la valorización promedio en ese mercado, registró un crecimiento de 118 por ciento. Adicionalmente, más personas llegaron a buscar opciones de inversión allí y por eso el año pasado se negociaron 16,63 billones de pesos, es decir, 67.868 millones de pesos diarios. Este promedio es considerablemente superior al de 2004 que había sido apenas de 15.000 millones de pesos.
Pero mientras todos los inversionistas llegaban a la Bolsa, las grandes empresas parecían en retirada. El año pasado apenas 10 de las 100 con mayores ventas tenían registrada su acción y la negociaban habitualmente. Dentro de ese grupo exclusivo estaban: Bavaria, Diaco, Cartón de Colombia, Carulla, Argos, Nacional de Chocolates, Éxito, ISA, Fabricato, Acerías Paz del Río, ETB y Gas Natural. Este año, Bavaria y Diaco prácticamente ya no se negocian, lo que quiere decir que hoy, apenas ocho de las 100 grandes están en el portafolio de los inversionistas. Un panorama crítico.
¿Las causas de este fenómeno? El ajuste que hubo en los grandes grupos a partir de las fusiones y ventas, lo que explica que hayan salido algunos papeles. Sin embargo, el tema de fondo es que en el año del verdadero boom accionario, los grandes conglomerados industriales no estuvieron allí buscando opciones. Aún quedan 90 grandes empresas del sector real que podrían acceder al mercado de valores si quisieran financiarse.
Es claro que la preocupación inicial que se presentó entre los expertos por una posible sequía del mercado accionario ante la salida de Bavaria (que llegó a representar más del 11 por ciento del Igbc), no tenía sentido. Los altos niveles de negociación hoy se mantienen y muchas personas siguen sacándole provecho a ese mercado. A cambio de la cervecera, otras acciones como la de Cementos Argos o Suramericana de Inversiones se robaron el protagonismo y hoy mantienen agitado el clima.
Así que el reacomodo se dio sin mayores contratiempos. Pero a pesar de eso, el mercado accionario sigue siendo menor y no obstante de que ha venido creciendo, no gana terreno frente a otros. Hoy las acciones representan apenas el 1 por ciento de lo que se transa en la Bolsa de Valores de Colombia. El 99 restante son títulos de deuda pública (TES), papeles de renta fija y moneda extranjera.

Las valorizaciones
Pero que el número de papeles de grandes empresas se haya reducido y que el mercado accionario aún siga siendo incipiente, no opaca la otra realidad: los que tienen acciones de esas compañías le sacaron provecho hasta último momento a sus inversiones.
El caso más representativo es el de Bavaria, pues ilustra cómo alguien, con visión de largo plazo, puede tener una rentabilidad garantizada y abundante.
El año pasado este papel empezó a un precio cercano a los 27.000 pesos y en la OPA con SABMiller, cada acción fue adquirida a 44.398,81. Una valorización superior al 64 por ciento.
Pero el asunto no eran las ganancias de corto plazo. Juan Fernando Ruiz, analista del mercado accionario de la firma Gesvalores, recuerda que muchos inversionistas se llevaron una gran sorpresa, pues tenían esa inversión guardada en el ‘álbum familiar’, con un valor nominal muy bajo. Cuando llegaron a liquidar la operación se dieron cuenta de la nueva cotización y su patrimonio accionario pasó a valer muchos más millones de pesos.
Así que haber mantenido ese activo quieto en el portafolio durante años resultó todo un negociazo. Y ese es el mensaje que queda para los nuevos inversionistas, muchos de los cuales buscan opciones para el largo plazo y no solamente con el fin de especular.

Más movidas
Camila Pérez, directora de investigaciones económicas de Suvalor, recuerda que el año pasado fueron muchos los anuncios y rumores sobre movidas empresariales, lo que condicionó completamente el precio y los volúmenes de negociación.
El Grupo Empresarial Antioqueño consolidó su ajuste en el sector financiero y en las cementeras; se dio la venta de Coltabaco a Philip Morris; Valorem adquirió el ciento por ciento de TV Cable y el Grupo Gerdau compró a Diaco. Estas fueron apenas algunas de las noticias que se conocieron en 2005.
El asunto estaba realmente movido y todos estos anuncios significaron un impulso adicional en la valorización, pues la sensación que había entre los comisionistas era que estaban llegando los tiempos dorados en las empresas.
De las grandes compañías que aún siguen vigentes en el mercado, las que mayor valorización presentaron fueron ISA y Cementos Argos cuyo precio aumentó el año pasado por encima de 170 por ciento. Almacenes Éxito tuvo un incremento de 66,30 por ciento, mientras que la acción del Grupo Nacional de Chocolates creció 47 por ciento.
Carulla Vivero fue otra de las importantes con una variación de 140 por ciento, junto con Suramericana de Inversiones (138,5 por ciento). Cartón de Colombia ni Fabricato se pueden dejar atrás, pues estas acciones crecieron 50 por ciento y ciento por ciento respectivamente.
Todas estas cifras hacen ver que el reto para las grandes empresas del país es perderle definitivamente el miedo al mercado de acciones, pues muchos inversionistas nuevos están buscando opciones sólidas para el futuro. De esta manera, más personas podrán disfrutar de dividendos importantes, mientras que las empresas logran financiarse eficientemente. n