Especiales Semana

SAN ANDRES

13 de junio de 1988

ATRACTIVO TURISTICO
DE LA PLAYA A LA LOMA
Las compras no constituyen el único atractivo turístico del Archipiélago de San Andrés y Providencia. La magia de una región especialmente tratada por la naturaleza, las costumbres de su gente, la propia cocina isleña y el desarrollo de los deportes marinos hacen de éste un verdadero paraíso con múltiples opciones para disfrutar una agradable temporada de vacaciones, que se puede organizar, de una vez, desde cualquier ciudad del interior, aprovechando los diversos planes que ofrecen las agencias de turismo. También puede emprenderse el viaje dejando que la espontaneidad de los isleños se encargue de diseñar un horario inolvidable. A continuación reseñamos algunos de los atractivos turísticos de San Andrés, con la seguridad de que se quedarán por fuera muchas opciones fantásticas.

PLAYA, BRISA Y MAR
Las playas de Sprat Bight, que envuelven el principal sector hotelero y turístico de la isla, constituyen el más amplio y concurrido balneario del área urbana. La arena es blanca, abundan las palmeras y el agua llega mansamente hasta la orilla, de manera que en este lugar puede tomarse el baño sin peligro y a pocos pasos del hotel.

Sin embargo, para los amantes de la tranquilidad y la descongestión los isleños suelen recomendar las playas de San Luis, a diez minutos de camino del poblado que lleva este mismo nombre, en donde pueden observarse las mejores muestras de la arquitectura sanandresana.

El sector ofrece amplias playas solitarias, donde los cangrejos aún se atreven a salir en busca del alimento y las lagartijas se bañan en la lluvia. Las arenas abrazan la Bahia Sonora o Sound Bay, llamada así por el característico sonido del agua en ese lugar, que se mezcla armoniosamente con el canto de las gaviotas que pescan a pocos metros de la orilla.

Otro de los balnearios recomendados es Paz Hole o "piscinita" rodeada por una pared de roca coralina cortada a tajo. Las aguas tranquilas permiten apreciar el fondo submarino y poseen las condiciones adecuadas para nadar o practicar el buceo. Está localizada a 3 kilómetros del puerto El Cove.

JOHNY CAY
Desde las playas de Sprat Bight, y en medio del intenso azul del mar sanandresano, se observa Johnny Cay, un islote compuesto tan sólo por playas y palmeras, donde los isleños se refugian para entonar su música más melancólica.
Allí el visitante, además de dar un paseo en lancha, puede saborear los platillos típicos a precios razonables, acompañados por una piña colada servida en la base de un coco Johnny Cay es uno de los lugares más célebres del Archipiélago, caracterizado además por su arena, en tonos dorados, y por un mar que cambia de color caprichosamente.

EL ACUARIO
Heynes Cay es un islote poblado de palmeras que se halla unido a un banco de arena por una pasarela de madera. A un lado se encuentra bordeando el cordón coralino, un fantástico acuario natural. Provisto de una careta, el turista puede admirar el juego multicolor de miles de peces que se mueven sin destino sobre un fondo submarino de extrañas formaciones en coral.
Para llegar hasta el acuario es posible abordar un bote y atravesar la bahía en unos 20 minutos.

LA CUEVA DE MORGAN
Aunque la Cueva de Morgan constituye uno de los lugares que más frecuentan los turistas, una y otra vez, siempre hay nuevas sorpresas para el visitante en este atractivo lugar. Y es que la Cueva de Morgan no es sólo la boca misteriosa que el tiempo ha abierto en una mole de coral, sino una serie de leyendas que los nativos insisten en creer. Un osado nadador puede penetrar en ella para comprobar si es cierto que está constituida por pequeños laberintos, y que desemboca en una playa sin igual, que se ha mantenido prácticamente virgen por lo difícil de su acceso. Lo que es imposible de comprobar es si el tesoro del pirata Morgan se encuentra en sus profundidades. Por años, la familia Morgan, que administra el lugar y que asegura ser descendiente directa del corsario, ha inspeccionado la cueva, en busca del tesoro, sin ningún resultado.

EL HOYO SOPLADOR
Casi con seguridad podría afirmarse que cualquier turista que ha viajado a San Andrés tiene al menos una fotografía del Hoyo Soplador, adherida a las páginas de su álbum de familiar. Se trata de un símbolo de la isla, que semeja un geiser al lado del mar y que constituye uno de los mayores orgullos de los nativos. El fenómeno corresponde, en realidad, a un hecho natural producido por una serie de túneles subterráneos que comienzan en los arrecifes coralinos y terminan en un solo agujero a varios metros del agua: cuando la marea sube y una ola logra entrar con fuerza dentro de los túneles, arroja el aire comprimido por el hoyo. Es el momento mítico en el cual los isleños se exaltan... "el hoyo está soplando, silencio".
También es el momento de las fotografías y el instante de comprobar la fuerza del hoyo, con la preocupación de alejarse un poco de él.

LA LOMA
Si el turista desea entrar en contacto con la más pura tradición isleña, lo más indicado es visitar La Loma. La parte montañosa de San Andrés, desde donde se obtiene una excelente visión de todo el territorio.
Allí existen centros culturales como el Tamarind Tree (árbol de tamarindo) donde el arte y la cultura típica del Archipiélago se ponen de manifiesto. Una de las atracciones de La Loma es la iglesia bautista levantada en lo más alto de este cerro a mediados del siglo pasado, y que constituye el monumento más representativo de la isla. Fue construida en madera de pino traída directamente desde Alabama, y en su interior tiene un mágico ambiente que invita al recogimiento.

PROVIDENCIA Y SANTA CATALINA
Unidas por el Lover's Lane, o Paseo de los Enamorados, a 45 millas al norte de San Andrés aparecen las islas de Providencia y Santa Catalina. El turista puede llegar hasta ellas, normalmente, por vía aérea, gracias al servicio que varias veces al día prestan las aerolíneas Sam y Satena. Pero a la hora de visitarlas, el visitante debe cambiar su mentalidad. Debe estar consciente de que alli no encontrará los afanes y las urbes de la isla mayor del Archipiélago, sino una región más tranquila, menos contagiada de los vicios del turismo.
Incluso la misma geografía cambia radicalmente, pues este par de islas poseen un origen volcánico y montañoso, aunque esto no impide que sus playas de coral compitan con las de San Andrés. Además su plataforma submarina es mucho más extensa y rica.

Providencia y Santa Catalina encierran todas las leyendas de bucaneros y piratas que cautivan al hombre del interíor. Sus costumbres y su cultura permanecen más arraigadas, y la vocación marinera del isleño adquiere un matiz más romantico en esta región .
Frente a las costas de Old Providence, cerca de la Bahía Garret, se encuentra uno de los lugares más queridos por los isleños y más frecuentado por los turistas: Cayo Cangrejo, un pequeño islote mágico, rodeado de cristalinas aguas azules y de un insospechado paisaje marino, conformado por el más fantástico espejismo de peces y conchas de todos los colores. En la parte superior de Cayo Cangrejo hay un gran peñon desde donde se puede divisar la majestuosidad del mar, tapizado con diversos tonos. Allí existe también una asociación de lancheros, fundada para conducir a los turistas no sólo al propio cayo, sino a todos los lugares marinos de Providencia.

Providencia y Santa Catalina han recibido una atención especial del gobierno en los últimos años. Simón González, intendente del Archipiélago durante poco más de un lustro, organizó un plan de obras que incluyen desde un moderno muelle hasta una serie de instituciones de carácter educativo, cultural y recreativo. Precisamente el actual intendente de San Andres, Hidalgo May García, fue alcalde de estas islas en el inicio de la administración Betancur, y bajo las órdenes directas de González, pudo supervisar el desarrollo de estas obras.

Un dato que confirma el respeto de los isleños por su tradición arquitectónica es, precisamente, el concurso de la casa más linda, organizado por la propia alcaldia en conjunto con la aerolinea Sam.

NUEVO SISTEMA HOTELERO
Si se tratara de hablar de hoteles, en el Archipiélago San Andrés y Providencia hay para escoger. Desde las cabañas con los más módicos precios, hasta hoteles de primera categoría que ofrecen todo tipo de servicios.

No obstante, una nueva modalidad hotelera, que ya existia en lugares del interior colombiano, como Cartagena empezará a adoptarse en San Andrés. Es el Hotel Decamerón, que funcionará bajo el sistema de "todo incluido".

Este sistema, además de brindar comodidades y servicios sin limite a los huéspedes del hotel, permite controlar perfectamente los gastos de alojamiento, comida, bebidas y diversiones, ya que todo está incluido en la tarifa. El Decamerón San Andrés, que abrirá sus puertas el próximo 1° de junio a sólo 15 minutos del aeropuerto, en las playas de San Luis, contará con 60 con fortables habitaciones playa, piscina, bares, videobar, discoteca, restaurantes con diferentes especialidades y uno exclusivo para niños, recreación dirigida y un equipo de personal capacitado para poner en marcha el nuevo sistema.

DEPORTES ACUATICOS
Además de todos los atractivos turisticos que uno pueda imaginar, San Andrés es un verdadero paraiso para la práctica de los deportes marinos.
Desde la natación hasta el buceo. Pero allí todo cobra un valor especial.
En natación, por ejemplo, pueden organizarse agradables paseos, como ir desde la playa principal hasta Johnny Cay.
Este es un viaje sin peligros, que puede emprenderse con la compañia de algún experto, contactando el Club Deportivo Los Delfines.

El esqui acuático también cobra otra dimensión, debido a que mientras se practica el deporte se puede apreciar el-fondo marino, gracias a la trasparencia del mar. Ahora bien, en cuanto hace referencia al buceo, los expertos aseguran que este es el sitio ideal. Los equipos se alquilan sin problema y es muy fácil recibir un minicurso. Bajo el mar sanandresano existen verdaderos paisajes que vale la pena observar.
Hay muchos sitios para el buceo, de acuerdo con el nivel que se tenga.
Tambien hay expertos en la materia dispuestos a prestar su compañía. Y si el caso es practicar el velerismo, tan solo hay que recordar que en 1983 se celebró en San Andrés el Campeonato Mundial de Sunfish.