Especiales Semana

SECTOR FINANCIERO

24 de octubre de 1994




CUANDO LA ECONOMIA ESTORNUDA...
Las bolsas de valores siguen volando a pesar de los tropiezos ocasionados por los trastornos macroeconómicos.

EL MERCADO BURsátil nacional venía imparable. Hasta julio pasado había duplicado el volumen de sus operaciones con respecto a 1993. Tanto que el del país figura como uno de los mercados emergentes más importantes del mundo, como viene sucediendo desde que la economía colombiana se internacionalizó.

Sin embargo los recientes problemas de liquidez del mercado y las medidas para restringir cierta clase de inversión extranjera, y la misma alza de las tasas de interés de las últimas semanas, lograron frenar un poco el avance casi incontenible que predecía batir todos los récords existentes en las bolsas de valores colombianas. Sólo en agosto pasado el crecimiento porcentual enero-agosto se redujo al 90 por ciento (a julio iba en 103.3 por ciento).

Eso quiere decir ni más ni menos que en Colombia ya está empezando a aplicarse el famoso adagio de los inversionistas, según el cual cuando la economía estornuda, la bolsa se resfría. A pesar de esa situación nadie desconoce que el desempeño del mercado bursátil sigue siendo muy bueno, y tenderá a recuperarse cuando la coyuntura difícil se supere. Más cuando los préstamos y el dinero vuelvan a fluir como hasta hace seis meses.

El sector privado (68.7 por ciento) sigue liderando las mayores operaciones del mercado total y ya superó, en sólo los primeros ocho meses del año,los 11 billones de pesos, algo así como todo el presupuesto de la Nación. Los Certificados de Depósito a Término son los más transados, con un poco más del 37 por ciento de todo lo vendido en lo que va del año; después aparecen los Títulos de Participación del Banco de la República (11 .9 por ciento).

Las acciones, que a comienzos de esta década apenas representaban un 1.5 ó 2 por ciento de todas las operaciones de las bolsas del país, ya pasaron a ocupar el 10.1 por ciento del volumen total negociado. Los fondos de inversión extranjera han contribuido con una cuarta parte de las transacciones con títulos de propiedad de las grandes empresas del país.

La Bolsa de Bogotá realiza casi las tres cuartas partes de todos los movimientos bursátiles del país, y el resto de la torta se lo reparten las bolsas de Medellín y de Occidente (Cali). Mientras tanto las sociedades fiduciarias se convirtieron en los principales inversionistas, al conseguir el 21.5 por ciento del mercado. Después aparecen los bancos, luego las corporaciones de ahorro y vivienda y los fondos de cesantías y pensiones.

Los procesos de privatización emprendidos por el Estado también han contribuido significativamente a conseguir los mejores resultados del mercado, con compraventas por 521.574 millones de pesos, el 4.4 por ciento de todas las transacciones del mercado bursátil. Por donde se mire, el mercado de capitales colombiano seguirá siendo de los mejores, pero la verdad es que al menos por este año no logrará superar los récords logrados en 1991 cuando se convirtió en una de las vedettes de los mercados del mundo.