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TOCO FONDO

DESPUES DE TRES AÑOS DE PARALISIS, LA FINCA RAIZ VUELVE A SER UNA GRAN ALTERNATIVA DE INVERSION

24 de febrero de 1992

LAS VENTAS ESTAN MUY buenas. Y esa es la mejor señal de que la crisis se acabó. Después de una de las recesiones más prolongadas de los últimos años, el sector de la finca raíz se ha vuelto a convertir en buen negocio. De acuerdo con una encuesta realizada por SEMANA entre varias inmobiliarias de la capital, el resurgimiento de la demanda ha hecho que los precios de la vivienda sean hoy en día superiores en un 35 por ciento (en promedio y para los sectores altos) a los de hace apenas un año. Y con esa valorización, la rentabilidad de la inversión en vivienda a los esquemas de financiación existentes en el país superó en muchos casos el 80 por ciento en 1991 (ver cuadro).
Pero a pesar de haber sido la mejor alternativa de inversión el año pasado en finca raíz la vivienda se verá desplazada este año por la construcción de oficinas para arrendar. A tal punto que, según los expertos, dicha opción deberá figurar, sin lugar a dudas, en los portafolios de inversión para 1992, especialmente en los de aquellos inversionistas que puedan colocar sumas superiores a los 100 millones de pesos.
En materia de vivienda nuevamente según los expertos la mejor alternativa, tanto en Bogotá como en el resto de las grandes ciudades del país, estará en la llamada "vivienda exclusiva".
Por su localización y diseño, que la convierten en un bien excluyente, asimilable a las obras de arte, la "vivienda exclusiva" es la que tiene mejores perspectivas de valorización. Este, sin embargo, es un mercado muy especializado en el que se necesita de una buena asesoría.
Lo anterior no significa, sin embargo, que todas las posibilidades de inversión estén concentradas en la vivienda de mayor precio. En Bogotá, por ejemplo, hay un caso ilustrativo: el de la Colina Campestre. Se trata de un proyecto urbanístico basado en un programa denominado "la ciudad perfecta" que busca distribuir de la mejor manera posible el uso del espacio urbano, mediante un desarrollo estrictamente planificado lo que lo ha convertido en un sitio de gran atractivo para los sectores medio altos de la población está el caso del sector de Chapinero alto, zona que durante muchos años fue considerada como área de conservación y cuya liberación dio lugar a un sorprendente fenómeno de valorización que contagió, inclusive, al Chapinero tradicional. Según los expertos, un metro cuadrado de construcción en Chapinero alto, que costaba 230 mil pesos hace apenas un año, tiene hoy un valor de 310 mil pesos (ver cuadro).
Parece haber consenso, sin embargo, en que las palmas en materia de rentabilidad se las llevará este año la construcción de oficinas destinadas al arrendamiento. Con la apertura económica la consiguiente vinculación de nuevas compañías al país lo mismo que con el crecimiento que ha tenido el sector financiero, la demanda estará muy fuerte en 1992.
Y cubrirá todos los rangos, desde pequeñas oficinas de 30 metros cuadrados, hasta pisos enteros para la ubicación de grandes compañías.
Este, que fue también un sector deprimido en los últimos años, ha tenido una excelente recuperación. Al punto de que varios edificios que permanecieron desocupados durante mucho tiempo están hoy completamente vendidos y los constructores están felices con las utilidades.
Todo parece indicar, en resumen, que la finca raíz ocupará este año nuevamente el lugar privilegiado que tuvo hace apenas unos años en las preferencias de los inversionistas. Y que, combinada en proporciones adecuadas con otras inversiones, será parte obligada en el portafolio de quienes quieran tener una buena rentabilidad en 1992.