En el foro participaron Mario Gómez, asesor del despacho del Fiscal General en temas de derechos humanos y protección de infancia y adolescencia; Isabel Cuadros, de la Asociación Afecto contra el maltrato infantil; el psiquiatra Germán Casas; Mónica Vejarano, directora científica de la Asociación Creemos en Ti; y Carlos Valdés Moreno, director del Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses.

CONCLUSIONES

El compromiso por la educación sexual

En el foro ‘Hablemos de sexo, ¿cómo educar a niños, niñas y adolescentes?’, representantes de padres de familia, colegios, y escuelas y del gobierno se comprometieron a trabajar en conjunto e impulsar proyectos que garanticen una mejor formación.

10 de diciembre de 2016

Para que la educación sexual sea más efectiva debe comenzar en los hogares, pero se necesita un trabajo colectivo e integral en todos los espacios, incluidos los digitales. Esa fue la gran conclusión del foro ‘Hablemos de sexo: ¿cómo educar a niños, niñas y adolescentes?’, realizado el 24 de noviembre en Bogotá y organizado por el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) y Foros Semana.

En ese espacio quedaron establecidos los compromisos de todos los actores. Cristina Plazas, directora del ICBF, presentará un proyecto de ley ante el Congreso para que el programa Escuelas de Padres, que ya está en más de 300 colegios, se convierta en una política de Estado. “Mi primer compromiso es trabajar para que los niños sean la prioridad en la agenda pública”, dijo la funcionaria.

Por su parte, Ana María Peñuela, asesora del Ministerio de Salud y Protección Social en infancia y adolescencia, reconoció que se ha hecho un trabajo con el ICBF en la promoción de los derechos sexuales y reproductivos de los jóvenes, pero ratificó su interés en intensificar los esfuerzos para reducir los embarazos en niñas menores de 14 años y adolescentes en Colombia, tercer país en América Latina con más casos de madres menores de edad.

Los representantes de los padres, asistentes al foro, también asumieron sus responsabilidades y coincidieron en la necesidad de capacitarse cada vez más para ser mejores formadores. Por ejemplo, Carolina Piñeros, directora de Red PaPaz, impulsará que los colegios tengan entornos de protección e incluirá a un joven en los grupos de trabajo con los padres de familia en las reuniones desde el año 2017.

Trabajo en equipo

Uno de los puntos clave en el que se coincidió durante el foro es la necesidad de manejar un mensaje conjunto entre padres y colegios sobre la educación sexual. También quedó claro que es fundamental trabajar para que se denuncie el abuso sexual. Mario Gómez, asesor del? Fiscal General en protección de infancia y adolescencia, indicó que solo se denuncia el 60 por ciento de los casos e insistió en que es necesario que se reduzca la impunidad de aquellos que tienen relaciones sexuales con niños y niñas menores de 14 años. Aseguró que las instituciones del sistema de salud están en la obligación de reportarlos, pues “el 40 por ciento de los casos que no se denuncian, se pueden llevar a las autoridades y se verifican cuando una niña menor de 14 años da a luz. La prueba es contundente: el ADN del agresor es el ADN de la criatura”.

Así mismo, Carlos Eduardo Valdés, director general de Medicina Legal, propondrá un banco nacional de perfiles genéticos de abusadores sexuales como medida de control para estos criminales. “Mientras neguemos las causas y no nos comprometamos será difícil lograr la prevención”, afirmó. Isabel Cuadros, directora de la Asociación Afecto, aseguró que el 40 por ciento de los casos de abuso son cometidos por adolescentes y por eso invitó a los adultos a explicarles a los jóvenes la necesidad de educarse en el autocontrol como principio de respeto.

En general, los panelistas coincidieron en la importancia de abordar los temas de educación sexual en términos claros y sin tapujos. Este es un mecanismo efectivo de prevención. Los menores de edad que participaron en el foro señalaron que los adultos deben ser más directos al hablarles de sexualidad y que el silencio solo genera más dudas en ellos.

Cuándo y cómo hablar

Juan Carlos Vargas, de Profamilia, advirtió que hablar con los hijos depende del grado de madurez. “No es lo mismo ser un niño de 5 años en Bogotá que en el Cauca”, señaló. En este sentido, explicó que hay una charla recomendada para cada rango de edad. En la primera niñez se debe hablar de las partes del cuerpo y su cuidado; previo a la adolescencia, hay que plantear cómo se llega al embarazo; a los 12 años, enseñar sobre anticoncepción; y a los 15, definir las conductas sexuales consideradas incorrectas.

Sexo no es sexualidad

Elv?ia Vargas Trujillo, profesora de psicología de la Universidad de los Andes, recalcó las diferencias entre los conceptos: sexo, sexualidad y actividad sexual. El sexo se refiere a las características biológicas. El género abarca las normas socioculturales que definen cómo pensar, sentir o actuar según la apariencia, el cuerpo o el sexo. La orientación sexual tiene que ver con el sexo por el cual se siente atracción romántica o erótica. La actividad sexual son los comportamientos para activar el deseo de excitación. La sexualidad comprende el aspecto de identidad, características que describen sexo, género y orientación sexual al responder la pregunta ‘quién soy yo’. 

Cuidado digital

Los expertos también dieron consejos acerca de las precauciones en el uso de internet para evitar que sea un arma de doble filo en la seguridad o educación sexual de los niños y adolescentes, y recomendaron conocer a los amigos digitales, denunciar las agresiones en este medio y establecer reglas de uso para las redes sociales.