Adiós al ganadero

La trágica muerte de Juan Pedro Domecq Solís conmocionó a España. El lunes, cuando regresaba de una corrida de toros en Zaragoza, el propietario de la ganadería de lidia más antigua del mundo (fundada en 1757 por el duque de Veragua) sufrió un accidente de tráfico en Higuera de la Sierra, en la provincia de Huelva. Domecq, de 69 años, era miembro de una prestigiosa familia dedicada al negocio vinícola y ganadero. Renunció a la administración de la casa Pedro Domecq S.A. para dedicarse a la ganadería que lleva su nombre. Fue considerado el padre del toro contemporáneo, pues más de la mitad de las actuales ganaderías de España, Colombia y Ecuador se alzaron gracias a su simiente. Juan Pedro estuvo casado con la condesa de Asalto y era primo hermano del marqués de Valencina. El mundo del toro le dedicó una sentida despedida.