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| Foto: Instagram.com / sabinocaro

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El cielo y el infierno de Carolina Sabino

Haber interrumpido el embarazo vuelve a poner a la talentosa actriz en los titulares de prensa. A sus 38 años, Carolina ha tenido que sortear varios episodios polémicos y dolorosos.

12 de septiembre de 2015

El accidente de tránsito que dejó parapléjico a Víctor Manuel Quintero, pareció haber estado escrito antes de que sucediera. Fue como si Víctor no hubiese tenido más opción que aceptar la fatalidad y el destino.

Hacia la media noche del 20 de septiembre de 1998, Carolina Sabino se estaba despidiendo de un grupo de amigos, tras una cena que tuvo lugar en un apartamento de la calle 166, del norte de Bogotá. Catalina, la anfitriona, le pidió a Carolina que se quedara a dormir.

Pero la actriz prefirió irse argumentando que quería amanecer en su propia casa y que además al otro día tenía que levantarse a leer unos libretos. Y fue entonces cuando se montó, con tres copas de vino en la cabeza, en la camioneta Chevrolet Blazer que terminaría colisionando con el vehículo de Víctor Manuel, el mismo que a partir de ese día dejó de caminar.

Los días de Carolina comenzaron a tornarse un infierno. Aunque siempre alegó haber sido inocente, en 2005, es decir, siete años después de ocurrido el siniestro, el Juzgado 15 Municipal de Bogotá la declaró culpable del delito de lesiones personales culposas y agravadas.

Pero más allá del fallo, el mayor peso de Sabino fue saberse deudora de una indemnización de 345 millones de pesos, plata que se demoró varios años en pagar y que incluso la llevó hasta la detención domiciliaria. Carolina tuvo que pedirle el favor a un grupo de amigos para que le ayudaran a pagar la deuda, a través de fondos recolectados en un concierto.

La vida de Carolina Sabino ha estado trazada por la gloria y el escándalo. Son líos que han retumbado mucho más en la prensa sencillamente porque Carolina, desde los 6 años, es famosa.

A esa edad tuvo su primera aparición en televisión en el programa Pequeños Gigantes. Hija de la actriz Myriam de Lourdes, Sabino comenzó a aparecer en las producciones más importantes de la televisión colombiana: Pasiones secretas, Momposina, Eternamente Manuela, Guajira, Las Juanas, El Fiscal, Me amarás bajo la lluvia, El precio del silencio, entre muchas otras. Por su interpretación en esta última novela, Carolina ganó un India Catalina.

Como cantante, también escaló alto. Nadie que tenga más de 30 años olvidará el grupo Luna Verde, con el que Sabino hizo pareja con Jorge Cárdenas. El momento cumbre de Carolina como intérpete llegó en el festival internacional de Viña del Mar, en 1999,al ganar dos gaviotas de plata. En adelante, Sabino estuvo vinculada a producciones como Mujeres asesinas o series como Tiempo Final. También participó en las telenovelas La dama de Troya y Chepe Fortuna. En 2005 hizo parte del reality ‘Desafío 2005: Cabo Tiburón’.

Pero cuando la adversidad parecía haberse ido, ocurrió que la hermana de Carolina, la también actriz Lina Luna, terminó envuelta en uno de los peores escándalos políticos de los últimos tiempos.

Lina era la esposa de Andrés Sepúlveda, un joven que desde la campaña del precandidato a la presidencia por el Centro Democrático, Óscar Iván Zuluaga, espió ilegalmente a un sinnúmero de personalidades. De hecho Sepúlveda fue condenado por concierto para delinquir, acceso abusivo informático, violación de datos personales y uso de software malicioso. El hecho colateralmente tocó a la familia de Lina. Ella fue testigo del procedimiento de captura de su esposo, y luego tuvo que declarar varias veces en el proceso.

A raíz de una decisión muy criticada y cuestionada de la Fiscalía, Carolina Sabino vuelve nuevamente a ser noticia por un suceso judicial. Esta vez, el ente acusador anunció que le imputará cargos por haberse practicado un aborto.

No han sido pocas las voces de respaldo a la actriz, quien desde ya dijo que le sorprendía que un hecho tan personal y doloroso, “sea expuesto a la ciudadanía sin tener consideración por mi familia, principalmente por mi hijo Tomás, quien no entiende mucho el porqué de esta situación”, dijo la actriz en un comunicado. Un trago amargo más para esta mujer, a la que seguro ninguna cámara dejará de perseguir.