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Valerie está empeñada en permanecer al lado de su hombre, tal como hizo Hillary Clinton, después de lo sucedido entre su esposo y Monica Lewinsky. | Foto: AP

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Presidente francés “echa” de la casa a su compañera

Francois Hollande le pidió a Valerie Trierweiler que abandone el Palacio del Elíseo, ella insiste en que lo perdona y no quiere irse de casa.

16 de enero de 2014

Luego de que Valerie Trierweiler compañera del presidente francés fuera hospitalizada, después de enterarse de la infidelidad de Hollande con una actriz, el presidente le pidió que abandonara el Palacio del Elíseo.


Hollande quería romper su relación con Valerie el fin de semana pasado, pero tuvo que desistir de su idea luego de que la mujer fuera internada en una clínica. También se conoció que el mandatario no la ha visitado y quería que el sábado ella firmara un documento anunciando su ruptura.

La revista Le Nouvel Observateur reveló que Valerie se dio cuenta de las intenciones de su compañero, pero dejó claro que no tiene ninguna intención de empacar sus maletas. “Estoy de acuerdo con perdonarlo, pero no con abandonar mi casa”.

Según la publicación, la “primera dama” está empeñada en permanecer al lado de su hombre, tal como hizo Hillary Clinton después de lo sucedido entre su esposo y Monica Lewinsky.

Hollande prometió aclarar todo el enredo antes de su visita el 11 de febrero a la Casa Blanca.

Paris Match, medio para el que trabajó Valerie, escribió un artículo apoyándola en el cual destaca los innumerables esfuerzos de la compañera de Hollande por mantener viva la llama de la pasión.

Le Nouvel Observateur dijo que la infidelidad de Hollande con la actriz Julie Gayet era un “secreto abierto” desde hacía muchos meses. “Las alarmas se dispararon desde mediados de agosto de 2013 cuando Trierweiler viajó sola a Grecia, mientras que el presidente viajó a una ciudad del centro de Francia en la que Gayet pasaba vacaciones”, asegura la revista francesa.

Un libro publicado esta semana afirma que antes de mudarse al Palacio del Elíseo, Hollande lo primero que preguntó fue cómo podía salir de la mansión sin ser visto y si era posible conducir su motocicleta.

Segolene Royal, exesposa de Hollande y madre de sus cuatro hijos, le dijo meses atrás a la actual “primera dama” que debería de preocuparse por quién sería la nueva mujer de Hollande. Una “profecía” que ya se está cumpliendo.