El musical maldito

Todo parece indicar que la mala suerte persigue a Spider-Man: el regreso de la oscuridad (Turn off the Dark), el musical más caro en la historia de Broadway. De nada ha servido la buena estrella de Bono y The Edge, los integrantes de U2 encargados de componer la música. Desde 2007, cuando empezó la preproducción, su directora, la afamada Julie Taymor, ha tenido que posponer el estreno por cambios en el reparto y varios accidentes de los actores, que deben hacer arriesgadas acrobacias. En el hecho más reciente, Christopher Tierney, un doble que interpreta al Hombre Araña, sufrió una caída desde siete metros de altura. Algo similar les ocurrió a dos miembros más en días anteriores: durante un ensayo, Kevin Aubin, otro de los dobles, se rompió las dos muñecas y a Natalie Mendoza, quien hacía el papel de la superheroína Arachne, le cayó una cuerda pesada en la cabeza. La mala racha ya venía de tiempo atrás, cuando Alan Cumming, quien iba a ser el Duende Verde, y Evan Wood, responsable de interpretar a Mary Jane, la novia de Spider-Man, abandonaron el musical pues les parecía muy desorganizado. Por todos esos tropiezos, el espectáculo, valorado en 65 millones de dólares, es noticia casi todas las semanas en los medios estadounidenses. Los pocos que han podido asistir a los ensayos previos a su apertura oficial afirman que es un show sin precedentes en Broadway. Si todo sale bien y ningún otro participante se lesiona o se retira, la obra por fin verá la luz el próximo 7 de febrero.