Home

Gente

Artículo

‘Reality’ de 2003 fue el último disco de David Bowie antes de desaparecer de la escena musical. El cantante de 66 años volvió este mes con el álbum ‘The Next Day’ y sus fanáticos esperan verlo otra vez en concierto. | Foto: AP

MÚSICA

El regreso del camaleón del rock

Luego de 10 años de ausencia, David Bowie vuelve más fuerte que nunca. Su nuevo álbum ya es número uno en el Reino Unido.

23 de marzo de 2013

Enigmático. Esa es la palabra que mejor describe a David Bowie, el talentoso y siempre cambiante camaleón del rock. Tan poco se sabe de su vida privada y fueron tan raras las veces que el lente de un paparazzi lo capturó desde que se retiró de la escena hace diez años, que sus fanáticos especulaban lo peor. Se rumoreaba que se había ido a vivir a una isla paradisíaca, que estaba enfermo o incluso que había muerto. Pero justo cuando se creía que había partido para siempre, aparecía inesperadamente en la alfombra roja o accedía a hacer una escena de una película, solo para esfumarse de nuevo durante meses.


Sus seguidores se reconfortaban con saber que seguía vivo, pero su silencio musical los sumía en una inmensa pena. Por fortuna, eso cambió en enero cuando sin que nadie lo sospechara, Bowie anunció que lanzaría un nuevo trabajo discográfico. Por supuesto, la histeria y la expectativa no se hicieron esperar, pues se trataba del regreso del artista que definió la música y la moda de varias generaciones. Y no decepcionó. 

El primer sencillo de The Next Day llegó al número uno en la lista de iTunes a las pocas horas de su estreno y el álbum impresionó tanto a los fanáticos como a los críticos quienes no dudaron en describirlo como “absolutamente maravilloso” . Como si eso fuera poco, el disco vendió 94.000 copias en su primera semana y el domingo pasado le devolvió a su autor el primer lugar en las listas británicas, que no ocupaba hacía 20 años. 

Fuera del éxito rotundo que ha tenido el disco, el Museo Victoria y Alberto de Londres inaugurará David Bowie is, una exposición sobre el cantante en la que se presentarán sus trajes más emblemáticos, objetos personales y partituras originales, entre otros. 

Más de 42.000 personas adquirieron boletas antes del estreno del 23 de marzo, un número récord para la sala de exhibiciones. Algunos creen que la feliz coincidencia entre la fecha del homenaje del museo y la del lanzamiento de su nuevo disco es solo una estrategia publicitaria para darle más bombo a The Next Day. Así lo sea, lo cierto es que el cantante pasó de una década de sombras al estrellato y logró seducir de nuevo al público.

No en vano lo llaman el camaleón del rock. Desde que saltó a la fama a finales de los años sesenta, Bowie no para de transformarse y presentarle al público una nueva faceta de sí mismo. Ya fuera como el pelirrojo de las trusas y la imagen andrógina en Ziggy Stardust y Aladdin Sane, el duque blanco que cantaba soul y funk, el compositor de sus años en Berlín donde produjo Heroes, o el rockero de sastre formal de los últimos discos, todos sus personajes fascinan. 

Se sumerge tanto en los alter ego que crea para su música, que una vez confesó: “Fuera del escenario soy un robot. En cambio, cuando estoy sobre él logro mostrar emociones”. Tal vez por eso es que también es un apasionado de la actuación y algunas de sus películas, como The Hunger y Just a Gigolo, se convirtieron en fenómenos de culto.

Parecería que el inglés no hace nada mal. Es más, cada vez que se presenta como un nuevo personaje, causa sensación. Su música y estilo imponen las tendencias que inspiran a cantantes y diseñadores. Y el éxito de The Next Day, igual que el de David Bowie is, es tan solo la muestra de que el camaleón hace lo que quiere, cuando quiere y como quiere.