EL TESTIMONIO

EL REGRESO A Rusia de Alexander Soljenitsyn, tras 20 años de exilio, ha recordado al mundo los terribles episodios de los campos de concentración de Stalin, cuyos horrores se conocieron gracias a la obra de este escritor titulada Archipiélago Gulag. Sin embargo, ahora algunos sobrevivientes del 'monasterio de la muerte' aseguran que el afamado escritor ruso no vivió la parte más dura de los Gulag. Según ellos, Soljenitsyn fue tratado en forma especial y vivía como un privilegiado.
Tres sobrevivientes de Solovki -Lev Martoujin, Vera Sergievna y Vladimirich Antonov-, dicen en sus escalofriantes relatos a la prensa que Soljenitsyn nunca estuvo en 'el monasterio de la muerte', el terrible campo que inspiró la novela. Para Martoujin, de 80 años, "en la purga del 1937, muchos intelectuales llegaron a los campos. Pero Soljenitsyn nunca estuvo en Solovki. De hecho, la mayoría de sus impresiones eran de Moscú. El utilizó los relatos de los prisioneros que estaban allí para escribir su libro... Yo leí 'Archipiélago Gulag' y no me impresionó. Quien no estuvo allí no puede haber escrito una historia real de las atrocidades. El ha utilizado 220 testimonios y ahora es un hombre rico". Martoujin se refiere a la dacha de lujo que el escritor ha construido recientemente en las afueras de Moscú y que que ocupa 18 acres de terreno.
Otro de los protagonistas, Vladimirich Antonov, quien fue sentenciado a 10 años de trabajos forzados y hoy, a sus 74 años, escribe con la ayuda de su mujer un libro sobre las purgas de Stalin, afirma: "Soljenitsyn nunca estuvo en un campo. El estaba en una colonia donde las condiciones eran mejores".
Alexander Soljenitsyn fue condenado en 1945 a ocho años de prisión por sus críticas a Stalin. Al ser puesto en libertad fue deportado a Siberia, donde comenzó a escribir. En 1970 obtuvo el Premio Nobel de Literatura por Archipiélago Gulag, pero no pudo recibirlo sino cuatro años después, cuando fue expulsado de la URSS. Durante los últimos 20 años Soljenitsyn ha vivido en Vermont (Estados Unidos). Hace dos fue levantada la censura a sus obras. Pero el pasado 27 de mayo, el más célebre de los disidentes de la era soviética regresó a sus 75 años a Rusia. "Se llevará un profundo 'shock' al regresar -dice Martoujin-. No podrá comprender los cambios que se han producido".-