Home

Gente

Artículo

Elizabeth Taylor.

GENTE

Elizabeth Taylor, adiós a una diva

La actriz británica se encontraba hospitalizada desde hace algunos meses debido a una insuficiencia cardíaca congestiva, que le fue diagnosticada en el año 2004.

23 de marzo de 2011

A sus 79 años murió la actriz Elizabeth Taylor, quien se encontraba hospitalizada debido a una insuficiencia cardíaca congestiva, que le fue diagnosticada en el año 2004.
 
Taylor falleció en el hospital Cedars-Sinai Medical Center, en Los Ángeles (Estados Unidos), donde estaba internada desde febrero. 
 
"Liz" Taylor, un mito de la historia de Hollywood, falleció tras un vida intensa entregada al cine, su pasión a los hombres y las joyas, y marcada por una pésima salud.
 
Ganadora de dos Oscar por su papel en "Butterfield 8" (1960) y "Who's Afraid of Virginia Woolf?" (1966), así como de una estatuilla honorífica por su labores humanitarias (1993), protagonizó más de 50 películas, algunas tan conocidas como "Little Women" (1949), "Cat on a Hot Tin Roof" (1958) o "Cleopatra" (1963).
 
Temperamental, carismática y rebelde, esta actriz que debutó en plena edad dorada de Hollywood se casó en ocho ocasiones, dos de ellas con el actor Richard Burton, su gran amor junto con su tercer marido, el productor Michael Todd, según admitió ella misma. Tuvo cuatro hijos.
 
Elizabeth Rosemond Taylor nació el 27 de febrero de 1932 en Hampstead (Londres), donde vivió hasta que a los siete años sus padres, de origen estadounidense, decidieron instalarse en California (EEUU) ante el inminente inicio de la II Guerra Mundial.
 
Su vocación artística le vino por parte materna. Su madre había sido actriz teatral, mientras que de su padre heredó su amor por el arte.
 
Taylor atesoró durante su vida una gran colección de suntuosas joyas entre las que destacan un diamante de 33,19 quilates que perteneció a la mujer de un colaborador de los nazis y otro que fue propiedad de la esposa favorita del emperador indio Shah-Jahan, en cuya memoria mandó erigir el célebre Taj Mahal.
 
Dio sus primeros pasos en el cine con 10 años, en el filme "There's One Born Every Minute" (1942), que fue seguido por "Lassie Come Home" (1943) y dos películas más antes de saltar al estrellato con "National Velvet" (1944), un pedestal del que ya no se bajaría.
 
Después llegaría "Little Women" (1949) y ya en los 50, títulos como "Giant"(1956), en el que compartió cartel con Rock Hudson y el mítico James Dean, "Raintree County" (1957) con su amigo Montgomery Clift o "Cat on a Hot Tin Roof" (1958) junto a Paul Newman. Los dos últimos filmes le valieron sus primeras nominaciones a los Oscar.
 
La tercera llegó con "Suddenly, Last Summer"(1959), un año antes de que diese inicio su década de gloria en la que se coronó como la reina de Hollywood, gracias en parte a películas como "Cleopatra" en la que llegó a cobrar un millón de dólares, el mayor sueldo de la historia por entonces.
 
En los 60 recibió dos estatuillas, se casó con Richard Burton por primera vez -fue su matrimonio más duradero (12 años)- y estrenó 14 películas como "The Taming of the Shrew" (1967), antes de que su luz comenzase a apagarse en el firmamento del cine.

Conocida por su diminutivo, "Liz", fue considerada una de las mujeres más bellas de su tiempo y de sus famosos ojos "violeta" su marido Burton llegó a decir que eran "tan sexy que equivalían a pornografía".
 
A partir de los 70 comenzó poco a poco su declive, forzado en gran medida por sus serios problemas de salud, una cruz que arrastró durante toda su carrera, si bien su última película fue en 1994, "The Flintstones".

Elizabeth Taylor, que fue nombrada Dama del Imperio Británico por la Reina de Inglaterra en 2000, pasó por el quirófano al menos en treinta ocasiones y no por razones estéticas.

Dolencias en la espalda, cuello, piernas, diversas fracturas, dos sustituciones de cadera, un tumor cerebral benigno o un tratamiento contra el cáncer de piel fueron algunos de sus padecimientos.

La actriz, que también se sometió a una cura de desintoxicación de alcohol y pastillas, reconoció que se vio al borde de la muerte en varias ocasiones, especialmente por neumonía o por una arritmia cardíaca.

Sus últimos años redujo mucho sus apariciones en público, que siempre hacía en su silla de ruedas debido a una osteoporosis, pero mantuvo su actividad como líder de campañas contra el sida, una enfermedad que se llevó a algunas de sus amistades.
 
EFE