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LA MUJER ESCANDALO

Con la aparición de una película sobre el famoso "caso Profumo", la historia de Christine Keeler vuelve a cautivar al público.

19 de junio de 1989

Chrístine Keeler ha surgido de sus cenizas a raíz de la exhibicion de la película "Escándalo", en el Festival de Cannes. El estreno, realizado hace un mes en Gran Bretaña y Estados Unidos, atrajo gran cantidad de publico y coincidió con la aparición de su autobiografía, escríta con la colaboracíón de un reportero británico.

Aunque para la nueva generación de cazadores de historias posiblemente su nombre no signifique nada, para muchos Christine Keeler es sinoóimo de escándalo. Han transcurrido 26 años desde cuando ella hizo tambalear los cimientos del gobierno conservador britanico. La historia, sin embargo, sigue emocionando al público.

El tiempo ha borrado la sensualidad de su rostro. Durante un cuarto de siglo estuvo a la sombra, sobreviviendo a su propia leyenda en la más absoluta pobreza y las pésimas relaciones con sus numerosos maridos y amantes. Ahora, la película y su autobiografía la rescatan del olvido. En momentos en que el actual gobierno se recupera del escándalo provocado por la belleza hindu Pamella Bordes, "Escándalo" y su protagonista emergen dentro de un clima que no podía ser más apropiado. La historia de Christine Keeler ha vuelto a cautivar a los espectadores aunque algunos de sus protagonistas están muertos o han sido rehabilitados por la mismísima reina Isabel.

Todo comenzó un día de verano de 1961. La protagonista era entonces una muchacha morena y ambiciosa, que había abandonado su paupérrimo hogar en Berkshire para buscar trabajo en Londres. Tenía 20 años y actuaba como bailarina nudista en un bar cuando fue descubierta por un médico osteopata, favorito de los millonarios y nobles, Stephen Ward, quien no solo la incluyo en el grupo de muchachas que ofrecía los fines de semana a sus amigos sino también la sometió a un proceso de educación y refinamiento.

Los fines de semana eran cada vez más agitados. Ward la presentaba a los nobles que eran invitados a las fiestas campestres de las grandes mansiones y palacios, como la residencia de lord Astor en Berkshire.
Una calurosa noche de julio de 1961, Christine y Ward jugaban en la piscina mientras los anfitriones entretenían al presidente de Pakistan, Ayud Khan. Otro de los invitados principales era el secretario de Defensa, Jhon Profumo, uno de los hombres claves del gobíerno de Harold McMillan. La Keller queda desnuda cuando Ward, jugando, le arrebato el traje de baño.
Ella trato de taparse con una toalla, sín embargo, excítados por el alcohol y la belleza de la muchacha, el dueño de casa, lord Astor, y Profumo la persíguíeron alrededor de la píscina durante un buen rato. Finalmente, ella subio a vestirse. Más tarde descubrio que había causado un gran impacto al secretario de Defensa, quien con el pretexto de mostrarle la mansión la llevo en un recorrido por varias habitaciones, donde, cuenta Christine, aprovechaba para tocarla y besarla.

Esa mísma semana, la Keeler se convirtió en amante de dos hombres: el capítán Eugene Ivanov, de 37 años, agregado naval de la embajada soviética en Londres y buen amigo de Ward, y el ministro Profumo, quienes protagonízarían uno de los mas sonados escándalos políticos y sexuales de la historia británica. Recordando su relacion con ambos personajes, la Keeler señala que lo ve como algo normal. "No lo hice por dinero. No estaba en mi naturaleza actuar como una ramera".

Las relaciones de la muchacha con Ivanov y Profumo estallaron como una bomba cuando un negro, Johnnie Edgecombe, furioso porque la Keller lo había abandonado, la persiguio con una pistola hasta el apartamento de Ward y allí fue arrestado por la Polícía. Cuando los reporteros se enteraron del íncidente, Ward intentó cortar sus relaciones con la joven y esta, sintiéndose abandonada, conto toda su historia a la prensa, relatando en detalle los fines de semana con altos funcionarios. Las implicaciones políticas eran incontenibles.
Profumo renunció a su cargo minísteríal. Mientras era investigado por la Cámara de los Comunes se refugio en una sociedad que ayudaba a los pobres. En 1975, Profumo fue rehabílítado por la misma reina, quien le confirio la Orden del Imperio Británico por sus servicios sociales.

El medico Ward fue acusado de utilizar a Christine para extraer información secreta a Profumo, con el fin de pasarsela al agregado soviético. Si Ward era o no un espía, nunca ha podido ser comprobado. Pero Christine insiste en que sus conversaciones con el ministro se reducían a temas ecológicos y románticos. De todos modos, el medico fue acusado de proxenetismo y de recibir dinero de Christine y una amiga llamada Mandy Rice Davies. Mientras avanzaba el juicio, Ward fue encontrado inconsciente, víctíma de una sobredosis de nembutal. Murio tres días despues, sin conocer el fallo que le fue adverso.
Mientras tanto, el gobierno soviético llamó a su agregado naval en Londres.

De ahí en adelante la vida de Christine ha sido tensa y llena de problemas. Estuvo en la cárcel durante nueve meses, acusada de perjurío por haber demandado sin causa justa a un amigo llamado Lucky Gordon. Al salir, vivio 18 atormentados meses con un joven desempleado. Despues se caso con un obrero, con quíen tuvo un hijo, James, un ingeniero de sistemas que tiene ahora 23 años, y a quien jamás cuidó. Luego se caso con un fabricante de objetos metálicos. El matrimonio solo duro un año y ella quedó con un hijo de tres meses, Seymour, quien ha sido su compañero durante todos estos años.

Los años de oscuridad y pobreza parecen tener ahora un paréntesis porque, a raíz de la película y la aparición del líbro en Estados Unídos, ha tenido que conceder numerosas entrevistas. Ahora se encuentra en Nueva York para el lanzamiento de "Escándalo", y ha recibido. algunos anticipos por concepto de derechos editoriales y cinematograficos. Pero,en el fondo, sigue siendo la misma muchacha desconfiada e ingenua, aunque con más cicatrices y dolores.-