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‘In the Land of Blood and Honey’ también será proyectada durante el Festival Internacional de Cine de Berlín, que se celebra en febrero.

CARRERA

La nueva Angelina

La actriz mejor pagada de Hollywood ha sorprendido a la crítica con su debut como directora con una película sobre la guerra de Bosnia.

14 de enero de 2012

Aunque Angelina Jolie sigue siendo la mujer más solicitada en la alfombra roja, su reconocimiento ya no se debe a su imagen de símbolo sexual y actriz rebelde, sino a su interés en las causas sociales. Desde hace tiempo la protagonista de Tomb Raider ha tratado de cimentar esa faceta de estrella comprometida: cada vez son más recurrentes sus viajes a países en conflicto y hoy es madre de tres huérfanos que adoptó en Camboya, Etiopía y Vietnam. Atrás quedaron los días en que sus oscuras excentricidades eran la comidilla de la prensa y ahora está concentrada en cumplir su misión como embajadora de Buena Voluntad de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur).

No contenta con las giras humanitarias, Angelina se arriesgó a lanzarse como directora de cine para llevar sus posturas al público masivo. Una decisión difícil, pues reconoce que habría sido más cómodo quedarse delante de las cámaras para defender el título de la actriz mejor pagada de Hollywood, con ganancias anuales de 30 millones de dólares. Por eso, y por ser la esposa de Brad Pitt, su debut era uno de los más esperados desde que anunció que estaba escribiendo el guion de In the Land of Blood and Honey, una historia de amor durante la guerra de Bosnia-Herzegovina en la década de los noventa. Y al parecer gustó.

"Desde los primeros minutos de la película queda claro que es un trabajo serio y no un proyecto vanidoso", publicó la revista The Hollywood Reporter, mientras que en la gala de estreno en Nueva York la famosa corresponsal de guerra Christiane Amanpour no tuvo reparos en calificarla de "extraordinaria y valiente". La primera prueba de fuego de la ópera prima será el 15 de enero cuando se enfrente contra La piel que habito, del español Pedro Almodóvar, por el Globo de Oro a Mejor Película de habla no inglesa.

Gane o no, Jolie insiste en que su prioridad no son los premios sino la denuncia política. "Es posible que la gente juzgue la cinta negativamente porque la hice yo -aseguró al diario The New York Times-. Pero al mismo tiempo creo que no la habría podido hacer a menos que tuviera una carrera consolidada, especialmente porque se trata de un tema difícil de vender en Hollywood". Pese a que su nombre instantáneamente significa éxito en taquilla, ella misma financió buena parte de la película (se estima que costó cerca de 15 millones de dólares) e hizo un intenso lobby para que el gobierno bosnio la dejara filmar en Sarajevo, luego de que la Asociación de Mujeres Víctimas de la Guerra de los Balcanes trató de detener el rodaje.

Desde el principio, la trama levantó polémica porque retrata la violencia sexual contra las mujeres durante el conflicto, que dejó más de 100.000 muertos y dos millones de desplazados. Para narrar esa tragedia, la actriz usó como gancho la historia ficticia de Ajla, una artista musulmana, y Danijel, un agente serbio, quienes se enamoran antes de que la guerra estalle en la antigua Yugoslavia y vuelven a encontrarse en un campo de detención, donde ella se convierte en víctima y él, en su verdugo. Aunque Danijel tiene piedad con Ajla, eso no impide que la joven sufra los rigores de la guerra al igual que el resto de sus compañeras de cárcel.

Para mantenerse fiel al argumento, Angelina escogió actores que habían vivido en carne propia los bombardeos y la escasez de la época (de allí que los idiomas originales de la cinta sean el bosnio y el serbio). Ese rigor también le sirvió para investigar el tema a fondo mediante entrevistas a expertos y lecturas. Aún así, sus métodos no han estado ajenos a las críticas. Poco antes del estreno, el periodista bosnio James Braddock interpuso una demanda contra Jolie porque, según él, para escribir el guion se basó sin permiso en su libro The Soul Shattering. Ella niega las acusaciones, pero la pelea sigue abierta.

Por ahora, la artista está dedicada a promocionar In the Land of Blood and Honey con galas en las principales capitales del mundo, visitas a la Casa Blanca y video chats con el público, algo sin precedentes en su carrera como actriz. Angelina está tan feliz con su debut que incluso podría dedicarse de lleno a la dirección y, de hecho, el telón de fondo de su próxima cinta será Afganistán. A la mujer más deseada de los últimos tiempos le es imposible evadir la realidad política, como bien le explicó al diario El País de España: "Necesitaba hacer esta película por muchos motivos. Por lo que he visto en el mundo en los últimos diez años y por lo mucho que desconocía. Porque no puedo entender por qué la humanidad puede ser tan brutal. Porque no tengo respuestas a este tipo de atrocidades".

Detrás de cámaras
 
Angelina Jolie no es la única actriz que le dio un giro a su carrera para probar suerte en la silla del director. Estas son las cinco estrellas de Hollywood que han triunfado en ese papel:
 
Clint Eastwood nunca ganó un Óscar por sus papeles de hombre duro y solitario en películas del Viejo Oeste y policíacas, pero como director conmovió a la crítica y al público. Obtuvo su primera estatuilla en 1992 con Unforgiven y en 2004 repitió con Million Dollar Baby.
 
• La obra que consagró a Mel Gibson como actor y director fue Braveheart, galardonada por la Academia en ambas categorías en 1995. Sin embargo, el mayor éxito en taquilla de este amante de las historias épicas vino casi una década después con La pasión de Cristo, que fue realizada en latín, arameo y hebreo.
 
Robert Redford, considerado un símbolo sexual en las décadas de los sesenta y setenta, fue la revelación de los Óscar de 1981 por Ordinary People, su ópera prima. En 1994 también recibió una nominación en esta categoría por Quiz Show.
 
• Kevin Costner se consagró con la epopeya Danza con lobos, que narra la amistad entre un soldado blanco y los indios dakota. La cinta le valió dos premios Óscar en 1990.
 
• La faceta como director de George Clooney fue aclamada en Confessions of a Dangerous Mind en 2002 y, tres años más tarde, en Good Night, and Good Luck. Su más reciente trabajo, The Ides of March, recibió cuatro nominaciones a los Globo de Oro.