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Pippa lució un vestido de Sarah Burton, la misma diseñadora del traje de su hermana.

MONARQUÍA

La otra princesa

Pippa, la hermana menor de la aspirante a reina Kate Middleton, se robó el 'show' durante la boda real y hoy es considerada la soltera más cotizada del mundo.

14 de mayo de 2011

Quienes conocieron a las hermanas Middleton cuando eran niñas creían que iba a ser Pippa y no Catherine la que se casaría con un noble, pues sus compañeros de colegio la recuerdan como la más sociable y la que, por lo general, tenía novios aristócratas. Por eso no es raro que Kate, la mayor, le haya pedido que los meses previos a su matrimonio con el príncipe William tratara de mantener un perfil bajo y no le quitara protagonismo. Pippa, escogida como su dama de honor, le hizo caso y rara vez se dejó ver en público.

Pero la advertencia de nada sirvió el día de la boda. Después del multitudinario evento, miles de mujeres comprometidas en todo el mundo llamaron a las casas de diseño para que les confeccionaran el vestido de Pippa, cuando lo usual hubiera sido que pidieran el de la novia. Aunque su tarea solo se limitaba a llevar el ramo de Kate y a ayudarla con el velo del traje, no pudo evitar convertirse en la estrella de la ceremonia.

El público enloqueció apenas llegó a la abadía de Westminster y las redes sociales se llenaron con mensajes sobre su vestido, diseñado por Sarah Burton, directora creativa de la firma Alexander McQueen. La mayoría de los fanáticos coincidieron en que lució deslumbrante y no hicieron sino hablar de su derrière durante buena parte del acto. Ya existe en Facebook The Pippa Middleton Ass Appreciation Society, un grupo dedicado a admirar su cola, que hoy ya cuenta con más de 200.000 seguidores, y a alguien se le ocurrió vender camisetas con la leyenda: "Pippa Middleton, Queen of the Ass-tocracy" ("La reina de la trasero-cracia"). En Twitter su nombre se convirtió en tendencia y el cantante juvenil Justin Bieber envió un trino diciendo que la joven de 27 años estaba hermosa y que sin duda había sido el "hit" de la boda.

Tal fue el furor que despertó que algunos tabloides británicos titularon el día después del enlace: "¿Estás seguro de que elegiste a la hermana que era, Wills?". Otros periódicos dijeron que si bien ahora el pueblo debe dirigirse a Kate, la nueva duquesa de Cambridge, como 'Your Royal Highness' (Su Alteza Real), a Pippa la deberían llamar Your Royal Hotness, una broma que se refiere a su belleza. De hecho, una productora le ofreció cinco millones de dólares para que actúe en una película porno, pues, según su director, "tiene la hermosura y la actitud de una estrella de cine para adultos".

 Pero por muy tentadora que parezca la oferta, no hay ni la más mínima posibilidad de que Pippa acepte, no solo porque sería un escándalo terrible para la monarquía, sino porque ya tiene suficiente con unas fotos de su época universitaria que medios británicos y estadounidenses publicaron la semana pasada. La imagen que más polémica ha causado es de 2006, cuando posó topless en la cubierta de un yate, durante unas vacaciones en Ibiza con su familia. En otras, sale borracha bailando con un brasier morado y con un vestido hecho de papel higiénico. Su hermano menor, James, también protagonizó los titulares de algunas revistas del corazón por unas fotos en las que aparece desnudo con unos amigos

 Los Middleton están furiosos con los tabloides que publicaron el material y decidieron quejarse ante la Comisión Reguladora de Prensa para sacar las imágenes del mercado. Saben, sin embargo, que es apenas el comienzo de una larga batalla contra los paparazzi, quienes de ahora en adelante harán hasta lo imposible por retratar a Pippa en situaciones comprometedoras. "Su vida ha cambiado y ahora es propiedad pública le guste o no -dijo a SEMANA Mark Borkowski, relacionista público y autor del libro The Fame Formula-. Lo de las fotos es solo un ejemplo de lo difícil que será controlar la fama que ganó después de que la vieron más de 2.000 millones de personas por televisión".

 La popularidad de Pippa viene en ascenso desde 2008, cuando la revista inglesa Tatler la nombró la soltera más cotizada del Reino Unido, por encima de la princesa Eugenia, prima de William e hija del príncipe Andrés y la duquesa Sarah Ferguson. Ahora su fama es mundial y es considerada la mujer más deseada del planeta. "Puede que suene un poco exagerado, pero lo que importa es que es la protagonista del momento. La próxima semana seguro será otra persona", explicó a esta publicación Kate Reardon, editora de Tatler.

Pippa ha sido considerada siempre una chica diez. Algunos de sus compañeros del prestigioso colegio Marlborough, donde también estudió Kate, la llamaban 'Perfect Pip' porque siempre sacaba las mejores notas del salón y era una atleta destacada. Se graduó de Literatura Inglesa en la Universidad de Edimburgo, donde se enamoró de Lord Edward Innes-Ker, hijo del duque de Roxburghe, y mantuvo una relación con el conde George Percy, familiar del duque Northumberland. Entre sus conquistas, además de aristócratas, figuran herederos de las familias más ricas del país.

 Por ser hija de una exazafata y un exdespachador aéreo, no es extraño que algunos crean que ella y su hermana son unas arribistas y trepadoras que no merecen estar en las altas esferas. Hay a quienes incluso se les ha ocurrido sugerir que en la boda trató de conquistar al príncipe Harry, el padrino de Will, pero la verdad es que ambos ya están comprometidos. Harry al parecer sigue con su novia de toda la vida, la sudafricana Chelsy Davy, mientras que Pippa lleva saliendo con el exjugador de cricket Alex Loudon desde finales del año pasado. Se rumora que Loudon está esperando el momento perfecto para pedirle matrimonio.

 Luego de salir de la universidad, Pippa empezó a trabajar en una compañía dedicada a organizar eventos. Ese talento lo puso en práctica durante los preparativos de la boda de Kate, pues fue quien insistió en poner unas bolas de disco en el salón del trono del Palacio de Buckingham, donde se llevó a cabo una exclusiva fiesta en la noche. Actualmente la menor de los Middleton vive en un apartamento londinense con su hermano y dirige The Party Times, una página especializada en promocionar Party Pieces, la empresa de fiestas infantiles que hizo ricos a sus papás.

 Aunque no se conocen muchos detalles de su vida (desde su salto a la fama solo ha concedido una entrevista), quienes la conocen aseguran que se siente afortunada porque al fin logró entrar a la realeza sin las obligaciones ni los aburridos protocolos que debe cumplir una consorte. Si el éxito no se le convierte en una maldición, lo más probable es que aparezca en la portada de alguna revista importante o acepte un contrato de modelaje. Todo lo que se ponga, adonde vaya y con quien salga será el centro de atención de los medios. "En otro mundo sería una planeadora de eventos con un pelo fabuloso -escribió el Daily Mail-. En la órbita de la duquesa de Cambridge puede convertirse en una celebridad".