Las mujeres de Castro
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EN 1953, NATALIA FERNANDEZ REVUELTA, UNA JOVEN DE LA sociedad cubana, se enamoró perdidamente del entonces jefe guerrillero Fidel Castro y se fue a vivir con él a las montañas. Poco después nació su hija, Alina, lo cual causó un gran escándalo en la Cuba del momento. Años más tarde Fidel Castro dejó a Natalia y se casó con Delia Soto del Valle, con quien tuvo cinco hijos más. Con el tiempo, Alina Fernández, quien estudió derecho y diplomacia y también trabajó como modelo, se convirtió en una de las más publicitadas enemigas del régimen castrista. La pelea contra la dictadura llegó a su punto máximo cuando las autoridades le impidieron salir de Cuba para reunirse en México con su tercer marido. Como una de las críticas más acérrimas, Alina ha llegado a calificar a su padre de "tirano" y al régimen de "un callejón sin salida". No obstante, a finales de 1993, logró salirse con la suya y asilarse en Estados Unidos. Pero hay más: ahora se ha informado que su hija, Alina María Salgado, nieta de Castro, pronto viajará a reunirse con ella.