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Monje metalero

Al ver su larga barba blanca, su túnica marrón y sus sandalias, muchos piensan que Cesare Bonizzi tiene el disfraz más excéntrico que pueda vestir un cantante de heavy metal.

26 de julio de 2008

Al ver su larga barba blanca, su túnica marrón y sus sandalias, muchos piensan que Cesare Bonizzi tiene el disfraz más excéntrico que pueda vestir un cantante de heavy metal. Sin embargo, el hombre de 62 años, que grita con voz ronca al cantar sobre sexo y drogas, mientras se acompaña con la guitarra eléctrica, es en realidad un monje capuchino que vive en un convento en las afueras de Milán. Su nombre artístico es Fratello Metallo (Hermano Metal) y es el solista de una banda que acaba de lanzar su segundo álbum, titulado Misteri. El hermano Cesare explica que aunque siempre ha utilizado la música para comunicarse con los jóvenes, no canta para predicar, sino que a través de su pasión busca "que las personas le saquen el jugo a la vida y gocen de ella". Afirma que se enamoró de ese género musical hace 15 años cuando fue con un grupo de muchachos a un concierto de Metallica y quedó fascinado con su descarga de energía. Recientemente pudo estar en el mismo escenario en que tocó esta agrupación durante el festival Dioses del Metal. Para él, esa música no es satánica y asegura que nunca ha tenido problemas con sus superiores por su carrera artística. De hecho, está pensando enviarle una copia de su nuevo disco al Papa.