NACIO BARON

El, es uno de los hombres más ricos del mundo. Heredero de una fortuna amasada con fundiciones de hierro y acero en Alemania.
Ella, nacida en Valladolid, proviene de una familia pobre. Dicen que ejerce como quinta esposa una influencia total de tanto alcance que logró para España lo que no pudieron alcanzar Gran Bretaña, Alemania Occidental Estados Unidos, Japón y Francia: ser depositaria de buena parte de su colección de pinturas, una de las más valiosas y resguardadas del mundo.

El contraste no podía ser más significativo. Cuando el año pasado los Thyssen se decidieron a entregar su colección, ahí estaban, sentados en la misma mesa el ministro de Cultura, Jorge Semprún, quien luchó contra los nazis y fue encerrado en un campo de concentración, y el barón colocando en manos de los españoles 787 lienzos de los 1.400 que forman la colección, lienzos que serán colgados durante los dos próximos años en los palacios de Pedralbes, en Barcelona y Villahermosa, en Madrid. No es un regalo sino un depósito que durará nueve años y medio y que los españoles, conociendo a la esposa del barón, piensan que puede convertirse en algo permanente. Después de haber sido Miss Barcelona y Miss España y demostrado tener un temperamento fuerte, Tita Cervera o Tita Thyssen, será honrada por el rey de España con el título de duquesa, paca agradecerle sus buenos oficios en esta empresa que las revistas especializadas califican como la operación cultural financiera más importante de los últimos años. Es que la historia de las relaciones de estos dos personajes forma parte de la leyenda romántica de las casas nobles de Europa.

Su nombre completo es barón Hans Heinrich Thyssen-Bornemisza y el único sitio de la tierra donde se siente seguro y tranquilo es su descomunal villa que data del siglo XVII, a orillas del lago Lugano, en Suiza, una villa comprada por su padre al principe Federico Leopoldo de Prusia, en 1932. Su fortuna es incalculable y dicen que su colección de pinturas sólo es superada por la de la reina de Inglaterra. Tiene 67 años, todas las noches se viste de corbata negra, aunque sea una cena para dos. El padre, muy joven, abandonó Alemania, se marchó a Hungría y se casó con una baronesa. El barón nació en Holanda a donde la familia tuvo que huir cuando el lider comunista húngaro Béla Kun, sentenció al padre a muerte, por terrateniente. Tiene un hermano y dos hermanas mayores. Antes de casarse con Tita Cervera, Thyssen lo hizo con la princesa alemana Teresa de Lippe, en 1949; en 1954 con la inglesa Nina Dyer, quien después se suicidó; después, con una modelo escocesa, Fiona Campbell-Walter, y en 1967 con la brasilera Denise Shorto.
Con Tita Cervera lleva casado cuatro años, y su colección de joyas, formada en buena parte con pertenencias de la familia Thyssen, está catalogada entre las más valiosas.

Se conocieron en Cerdeña, en una fiesta dada por el barón en su yate.
Ella no se cansa de repetir la frase que resume bien el mundo que comparten: "La mirada que me dio cuando me conocio, lo sé ahora que estamos juntos, es la misma mirada que pone cuando descubre una pintura que sabe que tiene que comprar. Es la mirada del propietario... Claro que yo soy más cara que una pintura". Por supuesto que no sabía nada de pintura hasta su boda con el barón, pero algo debe haber aprendido después de estar rodeada de obras de Munch, Bonard, Canalello, Pissaro, Revoir, Toulouse-Laumec, Homer, Manet, Ticiano, Tintoreto, Carpaccio, Goya, El Greco, Gauguin, Corot y otros maestros, algunas de las cuales ya comenzaron a ser empacadas para su viaje a España. Curiosamente, él habla mal el español y ella se defiende apenas en holandés, alemán y húngaro, las tres lenguas del marido. Cuando estan juntos hablan una mezcla personal de francés e ingles.
No será fácil descolgar las pinturas de la villade en Lugano, la casa en las afueras de Madrid, las otras casas en Barcelona, Marvella, la Costa Brava, Londres, St Moritz París (comprada al viudo de Cristina Onassis) otra casa en Jamaica una suite en el hotel Pierre en Nueva York y otras poseciones urbanas y campestres . Pero ahi estan los aviones y yates de los Thysen para transportar la colección.

Pocas mujeres despiertan tanta curiosidad como ella. Con un hijo de padre desconocido que fue adoptado por el marido, Tita fue la quinta esposa de Lex Barker, quien interpretó a Tarzán en el cine. Luego se casó con Espartaco Santoni, un productor de cine; el matrimonio duró un año, pero suficiente para que ella apareciera en dos pésimas películas. Ahora se ha convertido en el personaje favorito de las revistas europeas al-haber logrado que el marido se desprendiera temporal y quizás definitivamente de la mitad de una colección de pinturas que, según los más cercanos al barón, ha sido siempre una auténtica obsesión, la misma que lo ha llevado a cambiar de esposa cinco veces. --