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REINA DE CORAZONES

UN LIBRO RECIEN EDITADO EN ESPAÑA, REVELA INTIMIDADES DE LA AGITADA VIDA AMOROSA DE ISABEL PRESLEY

24 de febrero de 1992

SALIR DE UNA FAmilia pobre de Manila, Filipinas; aterrizar en España para casarse con un hoy millonario cantante Guinness; convertirse después en marquesa en una sociedad donde los títulos de nobleza son sinónimo de élite; pasar luego a convertirse en la esposa de un poderoso ministro de gobierno; producir cinco hijos en el recorrido, y terminar siendo la figura más vendible de los medios de comunicación de su país, es una historia que sólo puede contar Isabel Presley. Es además joven, linda, elegante y millonaria, atributos que, reunidos en una sola persona, la convierten en una imagen óptima para las revistas frívolas y en blanco seguro de lenguas de todos los colores.
Así que si se trataba de inventar algo que se devorara la sociedad española más que el artículo semanal en la revista Hola sobre Isabel Presley, publicar un libro sobre su vida privada no podía ser otra cosa que un hit. Reina de Corazones es el título del libro que bajo la pluma de la periodista Paloma Barrientos, fue editado por el grupo español Zeta y que al otro día de lanzado al público desapareció de las librerías españolas como pan caliente.
El libro recorre los pasos de esta hoy famosa figura de la sociedad y las revistas españolas, a quien las malas lenguas apodan "ovarios de plata" puesto que, según ellas, selló con un hijo cada uno de sus enlaces matrimoniales que la ascendieron socialmente y aumentaron su cuenta bancaria.
Verdad o no, el caso es que la historia de Isabel Presley empieza bien lejos de España. En Filipinas y dentro de una familia más bien pobre que, según el libro, está cargada de complicados antecedentes: una tía acusada de narcotráfico, un hermano detenido por robo, otra tía volada con el marido de la mejor amiga, y una mamá hincha de Ferdinando e Imelda Marcos...
Pero el fuerte del libro, claro, es la historia amorosa de la dama que empieza a los 17 años con un filipino mucho mayor que ella, y quien se convierte en el motivo para que sus padres la exporten a España y la coloquen en un colegio para niñas.
Acabado el colegio y mientras estudiaba un tímido secretariado bilingue, un amigo le presentó a un incipiente cantante que por esa época era más conocido como ex portero del Real Madrid. Julio Iglesias, sardino y "guapo" no la impresionó demasiado según el libro pero en cambio la dejó embarazada. El 20 de enero de 1971, Isabel recibió por primera vez una argolla de bodas que la llevaría a siete años de matrimonio, tres hijos y a una vida vacía en una eterna sala de espera. Julio Iglesias y su voz derretida ascendían vertiginosamente a la gloria, mientras su esposa sola en su casa, descendía a las profundidades de la peor suerte humana: el aburrimiento.
Aburrimiento que, según el libro, solucionó con el marqués de Griñon, un cuarentón aristócrata, recién separado, quien la elevó al mundo de la nobleza española. A esta boda antecedió un suceso que la Presley según el libro esperó muchos años para tomar venganza. Un día el director de la revista Hola encontró en su contestador automático un anómino que le revelaba la relación clandestina de Isabel y su marqués. Isabel, aún casada con Iglesias y avisada por el director, pidió inmediatamente el divorcio al cantante que regresaba de una gira. Años después, ya instalada en el cenit de la sociedad, se enteró de la identidad de la voz anónima, quien acababa de separarse, y dejó rodar el rumor de que la dama en cuestión se había separado por homosexual...
Ese matrimonio, sin embargo, no duró mucho, pues un nuevo personaje esta vez uno de los poderosos de España había entrado en escena.
Miguel Boyer era entonces el superministro de Hacienda del gobierno de Felipe González. Pero aunque estaba casado y como funcionario público se sabía en el ojo de la opinión, Boyer y todo su poder no pudieron resistirse al encantamiento de la Reina de Corazones.
Por esa época sucedió otro impase que es terreno caliente en el libro, pues involucra a otra de las divas de las revistas rosa. Marta Chavari, en ese entonces cuñada del marqués de Griñon por ser ella misma marquesa de Cubas, se dejó picar la lengua y dijo: "Es incréíble cómo Isabel puede abandonar a su familia para hacernos esto". No sabía la rubia marquesa que pocos años después iba a tener que comerse sus palabras, cuando protagonizó carátulas al dejar a su flamante marqués por Alberto Cortina.
Lleno de minucias, anécdotas e historias de alcoba, la biografía de Isabel Presley tuvo ocupada a la sociedad española las pasadas navidades y a Isabel Presley, seguramente,indignada.