Home

Gente

Artículo

POLÉMICA

"Si hubiera querido, le hubiera podido revisar todos los documentos al agente"

Dania Londoño Suárez, la mujer que puso en jaque al Servicio Secreto de Estados Unidos, habló en exclusiva con La W Radio y contó detalles del escandaloso episodio que involucró a uno de los agentes que estaba encargado de la seguridad de Barack Obama.

4 de mayo de 2012

La mujer que puso en jaque al Servicio Secreto decidió poner la cara y contar detalles del episodio que desencadenó el escándalo de los agentes estadounidenses en Cartagena. Dania  Londoño Suárez habló en exclusiva con La W Radio, reiteró que nunca supo que se trataba de uno de los hombres que estaba a cargo de la seguridad de Barack Obama y aseguró que teme que puedan tomar represalias en su contra.
 
Sobre uno de los temas que más ha generado polémica en Estados Unidos, y es la posibilidad de que la seguridad del presidente Barack Obama hubiera estado en riesgo, Dania señaló que, de haberlo querido, ella habría podido hacer algo.

“Le hubiera podido revisar todos los documentos si hubiera querido. El hombre durmió toda la noche. Le dije que iba a llamar a la policía y no le importó”, le dijo a La W Radio.
 
"Si yo hubiera querido o hubiera sido de una banda terrorista, los puse en jaque. Son unos bobos. Siendo ellos de la seguridad de Obama dejan que pase todo. Cuando les dije que iba a llamar a la policía no les importó", declaró. 
 
Sin embargo, reiteró que así hubiera sabido que se trataba de un agente del Servicio Secreto, nunca hubiera hecho nada para extorsionarlo ni para sacarle información.  
 
Además, señaló que en ningún momento vio nada que le hiciera pensar que estaba con uno de los hombres encargados de la seguridad de Barack Obama.
 
Según ella, lo único "extraño" que vio en la habitación fue un uniforme café, pero eso solo la llevó a pensar que se trataba de algún militar. Nunca se imaginó que estuviera junto a un miembro del Servicio Secreto.

Dania aseguró que conoció al agente estadounidense en una discoteca a la que había ido con unas amigas y reveló que en el lugar estaban por lo menos otros 10 agentes.

“Tenían una conducta muy indisciplinada en la discoteca, estaban tomando mucho alcohol, se montaban en la barra a bailar. Todos estaban borrachos, compraban alcohol como comprar agua”.
 
Reiteró una vez más que ella no es una prostituta, sino una dama de compañía, y precisó que lo mínimo que cobra por una noche es un millón de pesos y que lo máximo que ha llegado a ganar ha sido dos millones y medio.

Relató que esa noche acordaron la tarifa de 800 dólares antes de salir de la discoteca y aseguró que durante todo ese tiempo el agente fue “muy cariñoso” con ella. Sin embargo, esto cambió cuando ella le cobró el dinero a la mañana siguiente.

“Ahí se transformó y se volvió agresivo. Me dijo ‘lárgate perra que no te voy a pagar’. Después sacó 50.000 pesos para mi taxi. Quedé en shock”.
 
“Le rogué desde las 6 y media hasta las 10, no me quería ir sin el dinero. No quería salir. No formé escándalo en el pasillo ni gritamos. Fue algo muy reservado”, dijo.

Cuando ya se iba, se encontró con un policía que, según ella, le preguntó qué estaba pasando. En ese momento el policía le ayudó a recoger plata entre varios agentes del Servicio Secreto. En total reunieron 250 dólares y ella se fue.

Ahora reconoce que tiene miedo, pues no entiende por qué hay tantos miembros del Servicio Secreto involucrados en el escándalo si ella solo sabe de uno, que fue con el que estuvo.
 
"La verdad sí temo por las represalias que ellos podrían tomar, porque ellos ahora están sin trabajo, se les dañaron sus matrimonios. Salí prácticamente huyendo del país porque me tachaban como la prostituta, y por ellos. Obvio que me da miedo", señaló.

Dania asegura que por el momento nadie del gobierno de Estados Unidos ha intentado contactarla, pero sostiene que eso la preocupa todavía más.
 
"Estoy asustada, y con más razón si nadie ha aparecido. Yo hubiese querido que el gobierno de Estados Unidos me contactara y me dijera que estuviera tranquila, que mi hijo y mi familia van a estar bien".
 
La mujer asegura que después de este episodio su vida ha quedado destruida. "Mi vida prácticamente me la dañaron. No debieron publicar mis fotos ni mi nombre". También dijo que desde que se destapó el escándalo, tanto ella como su mamá han estado muy deprimidas.
 
Por último, se refirió a la imagen que ha quedado de Cartagena en el exterior y aseguró que "en todas partes, en cualquier parte del mundo, en las calles se ven prostitutas. En Colombia es legal la prostitución. Pero no es que Cartagena esté inundado de prostitución. Eso es falso".