| Foto: comercial

ECONOMÍA

Estabilidad, palabra clave del 2018

Petróleo a 50 dólares por barril y tasa de cambio a 2.995 pesos harán que la economía colombiana se estabilice en los próximos años.

20 de noviembre de 2017

Las señales son claras: luego del fuerte descenso de los precios internacionales del petróleo en 2016 y parte de 2017, los niveles actuales muestran una estabilización gracias a que los diversos factores que caracterizaron el mercado de crudo empezaron a corregirse.

“La oferta y la demanda global de petróleo se equilibrarían en gran medida el próximo año y es esta perspectiva actual la que podría explicar que el petróleo fluctúe alrededor de los niveles actuales”, señala un análisis del Equipo de Investigaciones Económicas de Bancolombia revelado por Capital Inteligente, la plataforma de conocimiento especializado de Bancolombia.

“En este sentido, en nuestro escenario base la referencia WTI pasaría a cotizarse a finales de este año en un nivel de 48,51 dólares por barril a un nivel de 50,06 dólares en 2018 y de 52,23 dólares en 2019”, indica.

De acuerdo con los expertos de esa plataforma, esta perspectiva será favorable para Colombia. “Esa estabilidad va a permitir que la volatilidad del ingreso nacional que en años anteriores fue muy grande, se reduzca. Y en esa medida, un ingreso más estable del sector petrolero permitirá a los inversionistas definir mejor sus estrategias de inversión en el mediano y largo plazo”, indica un vocero del Equipo de Investigaciones Económicas de Bancolombia. “Un precio estable conformará un escenario favorable para la IED en el componente de materias primas en el sector del petróleo y eso además favorecerá la dinámica del ingreso nacional”, agrega.

Según el análisis publicado por Capital Inteligente, de Bancolombia, el cambio estructural a la baja en los precios del petróleo se explicó por la reducción en los costos de producción, las mejoras tecnológicas y el bajo costo del capital. Con esto, la producción no convencional de petróleo se incrementó y derivó en un aumento de los inventarios, lo cual se desarrolló en un entorno económico menos constructivo en el mundo desarrollado. El abrupto cambio en los precios del petróleo que se observó a finales de 2014, y que se extendió hasta mitad de 2016, pudo ser menos acentuado si la confluencia de estos factores estructurales se hubiese dado en menor magnitud.

“En adelante es poco probable observar un cambio estructural que impulse el precio del petróleo a los niveles observados antes de 2015. Pese a que se prevé un escenario económico más constructivo en 2018, y un aumento en la demanda de productos derivados del petróleo, los drivers más relevantes de este commodity anticipan que la dinámica del precio del crudo no experimente cambios apreciables”, explica este análisis.

En el corto plazo, producto del aumento de la demanda, el estancamiento en la producción no convencional y la reducción de inventarios, los precios del crudo se verían presionados al alza. “Por lo tanto esperamos una leve recuperación de los precios del petróleo en 2018. Consideramos que el desbalance entre la oferta y la demanda por crudo se reducirá el próximo año. No obstante, la incertidumbre sobre la robustez de la actividad productiva en el mundo desarrollado aún es elevada. Nuestro escenario base es de US$50 promedio para el próximo año”, revela el análisis publicado por Capital Inteligente de Bancolombia.

Para el país, y como efecto de segunda ronda, se verá un mayor crecimiento y dinamismo en la demanda interna, principalmente en la inversión tanto pública como privada, y en el consumo de los hogares, destacan los analistas de Bancolombia.

Un puñado de dólares

La estabilidad de los precios del petróleo tendrá repercusión, desde luego, en la tasa de cambio del peso con respecto al dólar. “En nuestro ejercicio de pronóstico –advierte el Equipo de Investigaciones Económicas en su análisis–, en la medida en que la tasa de cambio fluctúe alrededor de los niveles actuales, gracias a un precio del petróleo más estable, unido a la liquidez a nivel global, estamos viendo para este año una proyección de cierre de 2.950 pesos por dólar y, en 2018, de 2.995 pesos”.

Para los analistas, si el precio del petróleo sube mucho más de lo previsto, la tasa podría llegar a un promedio de 2.790 pesos y, si se descuelga, a 3.310 pesos promedio final para 2018.