Cuba dedica el 1º de mayo a EE.UU.

Alianza BBC
2 de mayo de 2009

Cientos de miles de personas desfilaron este viernes en la Plaza de la Revolución de La Habana en saludo al 1º de mayo, Día Internacional de los Trabajadores. Presidieron el acto Raúl Castro y el Secretario General de la central obrera de Cuba (CTC).

El líder sindical Salvador Valdés hizo un pequeño discurso en el que se refirió a los efectos del "férreo bloqueo" económico que impone EE.UU. a Cuba desde hace ya medio siglo, "con la obsesiva y fracasada pretensión de destruir a la Revolución".

De hecho, el desfile estuvo dedicado a exigir el cese del embargo económico, un tema en el que Cuba cuenta con el sostén la región. "Nos regocija ver las muestras de apoyo y respeto expresadas por numerosos mandatarios del continente", expresó Valdés.

Las relaciones con EE.UU. centraron la atención de todos los cubanos este 1º de mayo. El propio Fidel Castro lanzó una nueva reflexión sobre el tema y el canciller Bruno Rodríguez criticó la lista de países terroristas elaborada por Washington.

Estudiando a Obama

El comandante expresó que habían subestimado a Cuba y agregó: "hoy están dispuestos a perdonarnos si nos resignáramos a volver al redil cual esclavos que, después de conocer la libertad, aceptaran de nuevo el látigo y el yugo".
 
Fidel Castro aseguró que están estudiando cada paso de Washington. "No puede decirse todavía la última palabra sobre la evolución futura de la actual administración norteamericana. Hay elementos nuevos, tanto de carácter objetivo como subjetivo".

El ex presidente de Cuba recalcó la posición de su país ante la posible negociación con EE.UU.: "Estamos todos en el deber de luchar por la paz; no existe otra alternativa. Jamás, sin embargo, el adversario debe hacerse la ilusión de que Cuba se rinda".

Según fuentes del gobierno cubano las posiciones de Barack Obama aun no son claras respecto a las relaciones bilaterales. Raúl Castro calificó la apertura de viajes y remesas de los cubano americanos como una medida positiva pero mínima.

La lista terrorista

La Habana visualiza los "gestos" de Obama como escasos y contradictorios. De hecho la cancillería acaba de protestar por la ubicación de Cuba en el grupo de países que, según EE.UU., apoyarían el terrorismo a nivel internacional.

El canciller Bruno Rodríguez afirmó: "nosotros no reconocemos ninguna autoridad política ni moral al gobierno de los EE.UU. para hacer lista alguna en ningún tema ni para certificar buenas o malas conductas".

Rodríguez se refiere a la lista de "naciones que promueven el terrorismo", elaborada por el Departamento de Estado de EE.UU., en la que se incluyó a Cuba arguyendo que es "un refugio seguro" para miembros de diferentes grupos armados.

Recalcó el canciller "la posición de Cuba contra toda manifestación y forma del terrorismo donde quiera que se cometa" y afirmó que Washington carece de moral para erigirse en juez porque tiene "un largo expediente de acciones de terrorismo de Estado, no sólo contra Cuba".

¿Y los salarios?
Curiosamente nada se habló este 1º de mayo del tema salarial, uno de los que más apremia a los trabajadores cubanos. El propio Raúl Castro reconoció hace dos años que los ingresos salariales son insuficientes para vivir.

Los bajos sueldos afectan no solo a las familias cubanas sino a toda la economía nacional. Como consecuencia de eso se produce en el país una gran indisciplina laboral y un robo generalizado para aumentar así los ingresos.

Un salario cubano es el de alrededor de US$17 y la canasta básica mensual de una familia es, según académicos cubanos, de unos US$70, teniendo en cuenta las gratuidades y subvenciones que existen en distintos rubros de la economía.

La diferencia entre salario y canasta básica es lo que los trabajadores buscan robando en sus empresas y vendiendo en el mercado negro, una actividad que desangra la economía nacional y dispara los costos de cualquier producción.