Intervienen cuatro bancos en Venezuela

La intervención tiene que ver con incumplimientos relacionados con el aumento de capital sin especificar el origen de los fondos, el incumplimiento de los "indices de solvencia, entre otros.

20 de noviembre de 2009

El gobierno anunció el viernes la "intervención a puertas abiertas" de los bancos Canarias, Confederado, Bolívar y ProVivienda (Banpro), luego de determinar que esas entidades incumplieron una serie de normativas.

El ministro de Economía, Alí Rodríguez, dijo en conferencia de prensa que las autoridades decidieron la "intervención a puertas abiertas" de los cuatro bancos por "un conjunto de incumplimientos" relacionados con el "aumento de capital sin especificar el origen de los fondos", el incumplimiento de los "indices de solvencia" y de "carteras dirigidas", y la "prohibición de realizar operaciones con empresas vinculadas".

Al explicar las razones que llevaron al gobierno al intervenir las cuatro entidades, el ministro indicó que es "obligatorio para las instituciones del Estado garantizar el origen de eses fondos" cuando se compran bancos y afirmó que en los casos de bancos Canarias, Confederado, Bolívar y Banpro, esa exigencia no se cumplió.

Las cuatro entidades fueron adquiridas entre septiembre y octubre pasado por un grupo de inversionistas, encabezados por el empresario local Ricardo Fernández, quien mantiene negocios en el área de alimentos y vende productos a la red de mercados estatales Mercal.

"Las autoridades dictaron un conjunto de orientaciones, de medidas, de exigencias, que fueron sistemáticamente incumplidas", señaló el ministro al justificar las intervenciones, y agregó que el pase de estos bancos a manos del Estado permitirá "corregir los problemas que han presentado".

Rodríguez aseguró que a pesar de las intervenciones "las operaciones se mantienen normalmente" en los bancos.

"Los usuarios de estos bancos continuarán realizando sus operaciones como siempre lo han hecho porque las autoridades precisamente garantizan la estabilidad, la salud del sistema bancario venezolano", acotó.

El superintendente de Bancos, Edgar Hernández, dijo a la prensa estatal que las instituciones intervenidas "desde finales del año 2008 tenían impuestas medidas administrativas por el incumplimiento de algunos de los indicadores" que implicaban prohibiciones para "distribuir dividendos entre los accionistas, darse créditos entre empresas relacionadas", y aseguró que las regulaciones fueron incumplidas.

Los cuatro bancos intervenidos son de tamaño pequeño y apenas manejan en su conjunto 5,74% del total de depósitos del sistema, y 5,27% de los créditos totales, según balances de la Superintendencia de Bancos.

El Banco Canarias posee un plantel de 1.386 empleados y 92 oficinas, BanPro tiene 837 trabajadores y 59 oficinas, Confederado dispone de 773 empleados y 53 agencias, y Bolívar tiene 283 trabajadores y 22 oficinas.

El presidente del Consejo Bancario Nacional, el banquero Víctor Gill, manifestó el viernes el respaldo de la banca local a las intervenciones, y expresó que el gobierno tomó la medida para proteger a los depositantes.

"Las instituciones financieras van a seguir con su operativa diaria día, a día, con absoluta normalidad,...eso tiene que traducirse definitivamente en tranquilidad que es lo importante, en sosiego", agregó Gill al asegurar que el resto del sistema financiero venezolano está funcionando con normalidad.

Durante este año el gobierno del presidente Hugo Chávez realizó las intervenciones de Stanford Bank S.A. y del estatal Banco Industrial de Venezuela, y compró el Banco de Venezuela al grupo español Santander por 1.050 millones de dólares.

Luego de su intervención en febrero pasado Stanford Bank S.A., que pertenecía al banquero tejano Robert Allen Stanford, que resultó implicado en un caso de fraude, fue vendido tres meses después a la entidad local Banco Nacional de Crédito por unos 111,6 millones de dólares.
 
AP.