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Wen Jiabao (izq.) da la mano a su futuro sucesor como primer ministro, Li Keqiang, durante la apertura de la sesión parlamentaria, este martes en Pekín. | Foto: AFP

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China: La despedida del primer ministro

Wen Jibao habló acerca de las "contradicciones" que enfrenta al país entre desarrollo y medio ambiente.

5 de marzo de 2013

El primer ministro chino, Wen Jiabao, quien debe ceder su cargo a Li Keqiang, se despidió este martes al inaugurar las labores del Parlamento con una nota de confianza, la promesa a China de un crecimiento económico del 7,5 % en el 2013, después de lograr "victorias brillantes", aunque con una corrupción que sigue siendo galopante.

Ante unos 3.000 delegados que componen la Asamblea Nacional Popular (ANP, Parlamento) reunidos en el Palacio del Pueblo de Pekín, Wen Jiabao presentó el tradicional informe de actividad de su gobierno, un balance del "periodo excepcional" de los cinco años transcurridos y las perspectivas para la segunda economía del mundo.

La sesión anual de la ANP debe avalar este año la nueva dirección china designada en el XVIII Congreso del Partido Comunista chino (PCC), celebrado en noviembre. Xi Jinping, de 59 años, nuevo secretario general, debe ser designado oficialmente presidente de la República en sustitución de Hu Jintao, y Li Keqiang, de 57 años, debe suceder a Wen Jiabao al frente del Gobierno. Este nuevo tándem debe presidir China en principio los próximos diez años.

En su discurso de casi dos horas, Wen Jiabao fijó un objetivo de crecimiento del 7,5 por ciento para el 2013. El aumento del presupuesto de Defensa será del 10,7 %, en una economía cuya inflación debería alcanzar un 3,5 %, según su informe, que preconiza una "política monetaria prudente". El año pasado, con un 7,8 %, el crecimiento chino cayó a su nivel más bajo en 13 años.

Esta nueva y fuerte progresión del gasto militar chino puede alimentar la inquietud sobre las ambiciones de Pekín, que compensa su retraso militar respecto a Washington dotándose de armas cada vez más sofisticadas. Tokio y Pekín se oponen sobre la soberanía de un pequeño archipiélago deshabitado del mar de China Meridional. El conflicto se agudizó en septiembre del 2012 con la nacionalización parcial de estas islas por Japón.

Máxima prioridad de la nueva dirección, el combate contra la corrupción endémica dentro del Partido y el Estado ha merecido solo una discreta proclamación de intenciones en boca de Wen: "Reforzaremos la lucha contra la corrupción y a favor de la integridad de los funcionarios", dijo en la parte final de su discurso. La familia del primer ministro fue objeto el año pasado de revelaciones del diario The New York Times, que estimó su fortuna en 2.200 millones de dólares en el 2007.

El diario no identificó ninguna malversación por parte de Wen en persona. "Continuaremos con la construcción de un Estado de derecho", prometió. Reconoció que las autoridades también deben "estrechar lazos con las masas populares" y evocó un "sistema de equilibrio de poderes, de tal manera que la población pueda vigilar al poder y éste funcione con transparencia".

Wen Jiabao destacó los logros chinos de los últimos años como sus "grandes avances en la astronáutica habitada, la exploración lunar, la inmersión habitada a gran profundidad, el sistema de navegación Beidou por satélite, el lanzamiento de un superordenador" o el de un portaaviones y trenes de alta velocidad con ocasión de los Juegos Olímpicos de Pekín en el 2008.

El jefe del Gobierno saliente detalló extensamente las "contradicciones" que afronta China, sobre todo la existente "entre desarrollo económico y medio ambiente y recursos naturales", que, destacó, "se exacerba". Los importantes niveles de contaminación alcanzados en las ciudades chinas son uno de los primeros temas de descontento de la población. "Procuraremos promover un desarrollo 'verde', circular y con baja tasa de carbono", prometió Wen Jiabao sin más detalles.

El responsable no sugirió enmendar la política de hijo único a pesar del envejecimiento de la población: "Mantendremos la política de planificación familiar", dijo, aunque evocó la voluntad de "mejorarla progresivamente". Las labores de la ANP deben concluir el 17 de marzo. El sucesor de Wen Jiabao, Li Keqiang, debe ofrecer una conferencia de prensa.