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COMICIOS CON OLOR A DELFIN

Dos delfines de la política chilena, Eduardo Frei y Arturo Alessandri, se disputan la presidencia del país austral.

3 de enero de 1994

PARA LOS ANALISTAS, LAS elecciones generales del sábado 11 de diciembre en Chile se encuentran lejos del tradicional "palo", político. Una última encuesta preelectoral arrojó datos concluyentes: el candidato oficialista Eduardo Frei, hijo del ex presidente Eduardo Frei Montalva, recibió el 58 por ciento de la preferencia, y de lejos le siguió Arturo Alessandri Vesa, candidato de la coalición opositora Pacto Unión por el Progreso de Chile, con un respaldo popular del 20 por ciento. Los partidos minoritarios, tres de izquierda y uno de derecha, apenas podrían obtener el 8 por ciento en conjunto.
Eduardo Frei es un delfín de 52 años, que ha vivido los avatares políticos de Chile desde su infancia. Al lado de su padre, quien dirigió al país entre 1964 y 1970, aprendió el ejercicio del poder. Y aunque su vinculación con la militancia política sólo se concretó cn 1989, cuando fue elegido senador por Santiago, siempre ha mantenido un contacto cercano con las decisiones de la Democracia Cristiana.
Fue ese mismo partido el que lo eligió en mayo de este año como candidato para la presidencia a nombre de la coalición del gobierno actual, "Concertación por la Democracia". Quienes lo eligieron tuvieron presente el enorme parecido físico del candi- dato con su padre y la buena imagen que tiene frente a los empre- sarios y al sector financiero chileno. Al fin y al cabo Eduardo Frei se ha desempeñado por más de 20 años como ingeniero civil y especialista en hidráulica, lo que le ha permitido conoccr las necesidades del sector productivo del país.
Los opositores le critican su inexperiencia política. Alegan que "estar cerca del poder no es lo mismo que estar en elpoder". Sin embargo, la enorme popularidad que reflejan las encuestas y el buen manejo oratorio del candidato durante la campaña, obligan a muchos a aceptar aquello de que "hijo de tigre sale pintado".
El caso del candidato Arturo Alesandri Vesa, opositor al gobierno Aylwin y contendor de Frei, es otro ejemplo de delfinazgo político. Su abuelo, Arturo Alessandri Palma, gobernó el país entre 1920 y 1924. Además, es sobrino del ex presidente Jorge Alessandri Rodríguez, quien ejerció el poder de 1958 a 1964. Pero con todos esos antedentes, su campaña ha resultado desteñida. Los electores chilenos se inclinan por mantener eI gobierno en cabeza de la alianza que llevó al poder a Patricio Aylwin en 1989. Si esto se reafirma en los comicios del sábado, el resultado se puede interpretar como un voto de confianza a la actual coalición de gobierno.
Los grupos minoritarios, a su turno, han expresado su inconformidad por las dificultades que han tenido para acceder a los medios masivos de comunicación, especialmente la televisión. La semana pasada, siete empresarios de canales privados de televisión organizaron un debate entre los candidatos Frei y Alessandri, pero se abstuvieron de invitar al resto de contendores presidenciales con el pretexto de que las encuestas ya habían definido claramente a los posibles ganadores. El hecho produjo la reacción del Movimiento de Izquierda Democrática Allendista (MIDA) por intermedio de su candidato, el sacerdote católico Eugenio Pizarro.El religioso calificó el debate como una extensión del método excluyente que rige en el mecanismo electoral". En igual sentido se expresaron los otros aspirantes de grupos minoritarios: el ecologista Manfred Max Neef, el economista José Piñera y el sociólogo Cristian Reitze.
En realidad, detrás de todo el asunto televisivo estaba el móvil de atraer a los votantes indecisos, que son casi un 20 por ciento, a la opción de los candidaztos fuertes. El código electoral vigente, concebido por el antiguo régimen militar del general Augusto Pinochet, establece un sistema parlamentario binomial en donde las curules de los congresistas se reparten entre los dos grupos mayoritarios. Este sistema fortalece el bipartidismo y resulta inconveniente para quienes desearían postu lar candidaturas individuales. Esta dificultad, incluso señalada por el presidente Aylwin, no ha podido ser corregida por la cerrada oposición que existe en el Congreso de parte de la coalición de derecha. Este movimiento, que encabeza Alessandri Vesa. impidió hace algunos meses la reducción del período de gobierno de ocho a seis años.
En todo caso, de no ocurrir algún suceso extraordinario los electores chilenos cscogerán a Eduardo Frei para suceder a Patricio Aylwin. Y aún si el candidato no obtiene la mayoría en la primera vuelta, cosa que parece improbable, contaría con el 68 por ciento del respaldo de los votantes, según la última encuesta.