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Las redes sociales fueron determinantes en la caída del presidente Otto Pérez. | Foto: Archivo particular.

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¿Cómo las redes sociales ayudaron a tumbar al presidente de Guatemala?

Una vez más las plataformas sociales sirvieron para movilizar a los ciudadanos en torno a un objetivo común. Facebook y Twitter fueron fundamentales en la caída de Otto Pérez.

4 de septiembre de 2015

Guatemala está convulsionada. El ya expresidente Otto Pérez tuvo que renunciar a su cargo por las acusaciones de corrupción que pesan en su contra. Desde este viernes está preso. La historia de esta caída nació detrás de la pantalla de un computador. Sí, una vez más las redes sociales fueron el escenario de gestación de una pequeña revolución que cambió el poder político guatemalteco.

Todo comenzó en el mes de abril. De acuerdo con datos confirmados por la consultora Findasense, para la primera manifestación convocada 25 de abril en Facebook se enviaron 66 mil invitaciones y se logró convocar a 15 mil personas que se reunieron para exigir la renuncia de la por entonces vicepresidenta Roxana Baldetti y se manifestaron por medio del hashtag #RenunciaYa.

Cuatro meses después, la negativa del presidente Otto Pérez Molina de renunciar provocó la convocatoria al paro nacional del 27 de agosto, que se convirtió en el día con mayor interacción en redes sociales del año en ese país. El 69% de las conversaciones fueron generadas por hombres en Twitter y 31% por mujeres.

En esa ocasión la movilización gestada en redes sociales no tuvo comparación. Alrededor de 100.000 personas se reunieron en la Plaza de la Constitución y usaron sus redes sociales para generar casi 98.000 conversaciones, interacciones y noticias, lo que se convirtió en récord.

La consultora señaló que el 58% de las conversaciones en Twitter ese día estaban relacionadas al tema y el 30% (30.800) incluyó el hashtag #Paro27A. El 72% de las conversaciones fueron generadas por hombres y 28% por mujeres.

Eso generó una fuerte presión a los congresistas que debían votar para retirar la inmunidad del mandatario. El hashtag #ExijoMis105Votos durante el 1 de septiembre fue tendencia y se registraron más de 71.500 conversaciones relacionadas.

Dos días más tarde, en horas de la madrugada, se anunció la renuncia del presidente. Esto provocó nuevamente un pico en conversaciones en las redes. Más de 50.500 publicaciones relacionadas a #OPMrenunció y fueron realizadas por 21.916 cuentas de Twitter. Los expertos insisten en que las redes sociales han dejado de ser un sitio de pequeñas polémicas para convertirse en “plataformas de acción”.

“Lo que ocurrió en Guatemala sucedió de forma similar en la “Primavera Árabe”, en los “indignados” españoles o los manifestantes de ‘Ocuppy Wall Street’”, explica Rafael Fernández Tamames de Findasense.

Lejos de ser una simple tendencia o una moda pasajera, las movilizaciones y las redes sociales serán un complejo medidor de las realidades nacionales y la geopolítica. “La gente comienza a dimensionar que del post en Facebook a la marcha en plaza pública hay sólo un paso; y los gobernantes comienzan a padecer esta cruda tendencia”, explicó el comunicador experto en redes sociales Francisco Castillo.

La reclusión

El expresidente guatemalteco Otto Pérez, quien renunció acorralado por las acusaciones de corrupción, fue recluido este jueves en un cuartel militar donde deberá guardar prisión provisional. A las afueras una multitud celebraba su arresto.

Seguido de una caravana de vehículos de la policía, Pérez ingresó al cuartel de Matamoros, en el centro de la capital, poco después de que compareció en una maratónica audiencia judicial tras haber presentado su renuncia al Congreso en la medianoche del miércoles.

El juez del caso, Miguel Ángel Gálvez, dictó la medida por considerar que existía riesgo de fuga. Dos agentes policiales ingresaron a la sala judicial y tomaron al exmandatario de los brazos para llevarlo al cuartel.

Antes de salir de los tribunales, Pérez se detuvo ante los periodistas para refutar los argumentos del juez y la versión de la Fiscalía que lo acusa de encabezar una red de defraudación aduanera: "No tengo la más mínima intención de salir del país, voy a dar la cara", afirmó.