CREAN PARTIDO DE LAS MUJERES

Las discusiones teóricas en torno del tema terminaron en diciembre: el partido de las mujeres ya se ha formado, con tiempo suficiente como para presentar listas a las elecciones administrativas de la capital en 1985. Es esta una idea que había comenzado a formarse en mayo pasado, cuando en el seno del movimiento feminista italiano, se planteó la necesidad de presentar candidatas propias a las elecciones generales de junio.
La iniciativa de creación de este partido partió de trece mujeres, pero al margen del movimiento feminista del país. "El movimiento está dividido, pero naturalmente, si quiere adherir a nuestro partido será bienvenido". Con esta declaración de Marina Magaldi, periodista, una de las trece fundadoras, queda clara la distancia que el partido feminista ha querido tomar el movimiento feminista, uno de los más fuertes de Europa.
En mayo pasado, se celebraron en Roma dos conferencias nacionales del movimiento para tratar este tema: politizarse y pasar de "Movimiento" a "Partido", o mantener las iniciativas que determinaron su formación, en la década del setenta. Las discusiones, desatadas por el éxito femenino en las elecciones generales irlandesas de marzo último, en las que el Partido de las Mujeres obtuvo cinco escaños parlamentarios, dividieron sobre todo a las "políticas" que participan del movimiento. En aquel momento, las "políticas" (es decir, las mujeres adherentes a partidos políticos diversos, participantes como "independientes" del movimiento feminista) se inclinaron por la idea de hacer triunfar, dentro de los partidos tradicionales, las iniciativas del movimiento.
Pero el grupo que ha creado el partido de las mujeres, había abandonado ya en mayo aquella idea, "que en diez años fue incapaz de dar los resultados que esperábamos" explicó una portavoz del sector. El nuevo partido cuenta con quinientas inscritas: 494 mujeres y seis hombres. "La presencia masculina -afirmaron las fundadoras en el momento de presentarse a la prensa- es tolerada hasta un 5% la misma proporción con que las mujeres están actualmente representadas en el parlamento".
El primer objetivo de las trece fundadoras es el de precisar que no buscan contraponerse a los hombres. "Históricamente las feministas se opusieron siempre a los hombres", señaló en este sentido María Pía Magaldi, estudiante de abogacía, de 23 años. "Lo que nosotros queremos", dijo, "es una relación de colaboración, la unidad de la cual creemos sea posible el nacimiento de un futuro mejor para todos".
Así, y a pesar del hombre, el partido ha roto una de las "cláusulas" que caracterizaron el movimiento feminista: el separatismo. Giuliana Orsini, una de las fundadoras e integrante de la secretaría política, puntualizó: que "si bien es cierto que no hay igualdad ni económica, ni social ni política entre ambos sexos, creemos que tenemos que tener la fuerza de oponernos a inútiles y estériles enfrentamientos". Agregó que "lo más útil y constructivo es tender una mano a los hombres, para construir juntos un futuro de paz".
Por su parte, Erina Venturini, presidente de la Asociación de Amas de Casa, integrante de la secretaría del partido de las mujeres, señaló que "las feministas representan un pequeño porcentaje dentro de la nueva formación". y que "más tarde o más temprano el movimiento comprenderá que el separatismo fue un momento necesario, pero que ya ha sido superado".
Los objetivos esenciales del partido de las mujeres son los siguientes: reconocimiento económico del trabajo de las amas de casa, nuevas leyes sobre divorcio y aborto que protejan a la mujer, y reforma de la escuela.