Crece la tragedia

La operación terrestre de Israel en Gaza continuó esta semana con un balance cada vez peor: al viernes habían muerto unos 800 palestinos, 34 israelíes y más de 140.000 persona habían sido desplazadas. El peor día, sin embargo, fue el jueves, cuando una escuela habilitada por la ONU como refugio fue destruida por un bombardeo. De acuerdo al secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, murieron 15 personas, entre ellas, empleados de esa organización. Aunque varios medios internacionales culparon a un tanque israelí, este Ejército sostuvo que la tragedia se presentó en medio del fuego cruzado y que ellos no apuntaban hacia el lugar. En cualquier caso, dados los antecedentes, esta situación podría perjudicar el respaldo internacional de Israel. Y para empeorar las cosas, en Cisjordania palestinos e israelíes comenzaron a chocar, con saldo de seis muertos. La salida al actual conflicto coyuntural no es imposible, pero una solución de fondo se antoja casi inalcanzable. Los extremismos crecen y según afirmó a SEMANA Mattia Toaldo, del European Council on Foreign Relations, “muchos pensarán que la paz no da resultados, y esa ya es una conclusión muy peligrosa”.