Donald Trump: ¿Magnate non grato en Reino Unido?

De racista, demagogo y bufón calificaron los parlamentarios británicos a Donald Trump la semana pasada, cuando un debate sin precedentes tuvo lugar en la Cámara de los Comunes en Londres.

Más de 570.000 británicos firmaron una petición que llegó a debate en el Parlamento. Los ciudadanos pusieron en tela de juicio el posible veto de entrada del precandidato republicano Donald Trump a Reino Unido.

Durante tres horas, laboristas y conservadores criticaron los puntos de vista del magnate sobre los musulmanes, las mujeres, los discapacitados y el calentamiento global. Algunos sugirieron que el precandidato presidencial está promoviendo los crímenes de odio hacia las minorías con sus comentarios salidos de tono.

En efecto, su campaña se ha caracterizado por un ataque constante a los inmigrantes, sobre todo mexicanos y musulmanes, lo cual no solo ha indignado a la comunidad latina, sino que además está siendo usado por los grupos terroristas para promocionar sus políticas contra Occidente. En uno de los últimos videos terroristas, Estado Islámico retomó las frases de Trump para su propaganda, como ilustración de que los países de Occidente quieren atacar directamente al islam.

Pero Trump demostró no tener límites, ni escrúpulos. Esta semana declaró que podría salir disparando en la Quinta Avenida de Nueva York y no perdería votos. Lo más preocupante es que, efectivamente, sigue subiendo en las encuestas, por representar las facciones más radicales del republicanismo en Estados Unidos.

Sin embargo, a pesar de la clara falta de vergüenza del magnate, la mayoría de los parlamentarios británicos estuvo en contra de vetar al magnate. El argumento fue que tomar una decisión de esa magnitud podría ser contraproducente, pues podría dejarlo como una víctima o un mártir.

La posición del Parlamento británico es comprensible en la coyuntura. A menos de una semana del comienzo de las primarias en Iowa, Donald Trump ha desplegado toda su maquinaria publicitaria y no sería conveniente darle más alas mediáticas al controvertido candidato.