¿Donde diablos está Xi?

¿Indisposición? ¿Crisis cardiaca? ¿Accidente de tránsito? ¿Atentado? ¿Tensiones políticas? Desde hace unos días todo tipo de teorías de complot, rumores y chismes corren sobre la suerte de Xi Jinping, de quien se supone es el heredero de Hu Jintao a la cabeza del todopoderoso Partido Comunista Chino. En un país en el que la opacidad es regla, muchos se preguntan porqué Xi no aparece públicamente desde el primero de septiembre y porqué anuló citas con mandatarios extranjeros e incluso con la secretaria de Estado norteamericana, Hillary Clinton. Algunos dicen que tras bambalinas hay una intensa lucha por el poder, pues para octubre está programado el XVIII Congreso del Partido, donde se definirá el rumbo y los mandos de China para la próxima década.