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EL EFECTO DOMINO

Los partidos comunistas de los países occidentales enfrentan un panorama oscuro: cambiar de nombre, cambiar de ideas, o disolverse.

7 de octubre de 1991


PASARSE LA VIDA EN POS de un ideal, y verlo luego Convertido en humo, no puede ser inocuo. Los siquiatras tal vez tengan que bautizar un nuevo síndrome, el del poseomunismo, ante la multiplicación de casos en el mundo entero, ahora que el Partido-Madre ha sido prohibido en la URSS. Sin contar con el impacto que representa la caída del PCUS para los movimientos guerrilleros que aún quedan en Latinoamérica, y para el Gobierno cubano, los hechos de Moscú han dejado a los