La pedofilia es “como una misa satánica”: papa Francisco

El papa Francisco afirmó este lunes que "la puerta está siempre abierta" para tratar el tema de los matrimonios de sacerdotes, si bien "en este momento hay otros temas sobre el tapete".

Según recoge la agencia de noticias italiana Ansa, el papa apuntó que el celibato no es un "dogma de fe" en la Iglesia Católica y recordó que hay sacerdotes casados en los ritos orientales.

"El celibato no es un dogma de fe, es una regla de vida que yo aprecio mucho y creo que es un regalo para la Iglesia", afirmó el pontífice.

Francisco hizo estas aseveraciones a los periodistas en su viaje de vuelta desde Israel a Roma, en unas declaraciones a los periodistas que recuerdan a las que el máximo líder de la Iglesia Católica hizo a la prensa durante su viaje de Brasil a Roma, en las que afirmó que no se debía marginar a los homosexuales.

Petición de las mujeres

Estas declaraciones del pontífice se producen unos días después de que un grupo de 26 mujeres quienes aseguraban tener o haber tenido una relación con un sacerdote le pidieron cambiar la norma que impide a los clérigos casarse.

Este mes, un grupo de mujeres involucradas con sacerdotes católicos escribieron una carta al papa Francisco en la que le pedían revisar la ley de celibato de la Iglesia Católica para los clérigos.

Las 26 mujeres, procedentes de Italia y otros países, dicen que todas están o estuvieron involucradas en una relación con un sacerdote y afirman que escriben en nombre de muchas otras mujeres en situaciones similares.

La carta habla de "el dolor de no poder vivir sus vidas plenamente" y pide al pontífice reunirse con ellas.

El papa previamente había apoyado la tradición del celibato, pero en el 2010, escribió que su posición al respecto podría vacilar.

El pontífice continuó visitando, hasta que murió en noviembre pasado, a la viuda del exobispo Jerónimo Podestá, quien renunció al ministerio para casarse hace más de 40 años.

“Cero tolerancia”

Durante el vuelo de regreso de su gira por Cercano Oriente, el pontífice también abordó el tema de la pedofilia. Afirmó que no habrá ninguna tolerancia, ni los acusados tendrán privilegio alguno a la hora de ser juzgados. "El abuso sexual es un crimen horrendo (...) Es como una misa satánica", dijo.

A principios de junio, Francisco celebrará una reunión y misa en la residencia de Santa Marta, a la que acudirán ocho víctimas de abusos cometidos por miembros de la iglesia.

Francisco se refirió también a su antecesor, Benedicto XVI, quien, según señaló, "ha abierto la puerta a los papas eméritos, algo que antes no existía". Indicó que Benedicto, al renunciar al papado, sentó precedente para quienes asumieran el cargo al frente de la Iglesia en el futuro.

Si un Papa siente que se debilitan sus fuerzas, debe plantearse las mismas preguntas que Benedicto, dijo Francisco.

BBC, DW.