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Papa Francisco lava y besa los pies de los reclusos durante una Misa de la Cena del Señor del Jueves Santo oficiada en la cárcel romana de menores de Casal del Marmo en Roma. | Foto: EFE

SEMANA SANTA

El Papa Francisco lava y besa los pies de jóvenes presos

El sumo pontífice realizó el lavatorio de pies en un centro correcional juvenil de Roma.

28 de marzo de 2013

El papa Francisco lavó y besó los pies de una docena de reclusos en un centro correccional juvenil durante un ritual del Jueves Santo que practicó durante años como arzobispo de Buenos Aires. Dos de los doce eran mujeres, un gesto significativo dado que el rito representa el acto de Jesús de lavar los pies de sus discípulos varones.

La misa fue celebrada en el centro de detención Casal del Marmo en Roma, donde 46 varones y mujeres jóvenes están detenidos. Muchos de ellos son gitanos o migrantes del norte del Africa, y los doce seleccionados incluyeron también detenidos ortodoxos y musulmanes, según las versiones noticiosas.

Como los detenidos son mayormente menores —la instalación aloja a presos de 14 a 21 años_, el Vaticano y el ministerio de justicia limitaron el acceso de la prensa al interior. Pero la Radio Vaticana transmitió la misa en vivo, y Francisco dijo a los detenidos que Jesús lavó los pies de sus discípulos en vísperas de su crucifixión en un gesto de amor y servicio.

"Este es un símbolo, es un signo; lavar vuestros pies significa que estoy a vuestro servicio", dijo Francisco a los jóvenes. "Ayudaos los unos a los otros. Esto es lo que Jesús nos enseña. Esto es lo que hago. Y lo hago de corazón. Lo hago de corazón porque es mi deber; como sacerdote y obispo debo estar a vuestro servicio".

Posteriormente, el Vaticano difundió un video limitado del ritual, en el que se vio al pontífice lavando pies negros, blancos, masculinos, femeninos, uno tatuado. Arrodillado sobre el piso de piedra, el papa de 76 años vertió agua de un cáliz de plata sobre cada pie, lo secó con una toalla sencilla de algodón y después se inclinó para besar cada uno.

Como arzobispo de Buenos Aires, el excardenal Jorge Mario Bergoglio celebró el ritual del lavado de pies en cárceles, hospitales y hospicios, como parte de su ministerio para los pobres y los marginados. Es un mensaje que continúa ahora en el papado, diciendo que desea una Iglesia "para los pobres".

Los papas anteriores efectuaban el ritual del lavado de pies del Jueves Santo en la gran basílica de San Juan de Letrán, en Roma, y los doce elegidos eran siempre sacerdotes para representar a los doce discípulos.

El hecho de que Francisco haya incluido mujeres en el ritual es llamativo dada la insistencia en algunos en la Iglesia de que estuviese reservado solo para varones. El argumento de estos es que los discípulos de Jesús eran todos varones y que el sacerdocio católico que evolucionó a partir de los doce discípulos originales está restringido a los hombres.

"Que el papa haya lavado los pies de las mujeres es muy significativo porque en algunas diócesis se había desestimado e incluso prohibido la inclusión de mujeres en esta parte de la misa del Jueves Santo", dijo el sacerdote jesuita James Martin, autor de "La guía jesuita".

"Demuestra el amor inclusivo de Cristo, que fue ministro para todos aquellos a quien encontró: hombres o mujeres, esclavos o libres, judíos o gentiles", afirmó.

Después de la misa, Francisco saludó y regaló un huevo de Pascua a cada uno de los presos.

"No perdáis la esperanza", les dijo. "¿Comprendéis? Con esperanza siempre podréis ir adelante".