El último adiós para el agente Watson

Muchos en el mundo no sabían quién era James Watson, pero desde que fue asesinado en Bogotá el jueves en la noche, su nombre se popularizó, especialmente en Colombia. Una banda de ladrones intentaron hacerle el famoso “paseo millonario” al extranjero, a quien luego apuñalaron por oponer resistencia al robo, con tan mala suerte que el hombre resultó ser un agente de la DEA que se encontraba en el país.

La rapidez con que la policía colombiana capturó a los responsables del asesinato sorprendió a muchos y por eso el nombre del agente ha sonado constantemente esta semana en los medios de comunicación. Sin embargo, aún muchos se preguntan ¿quién era James Watson?

La mayoría de sus familiares y amigos lo conocían como ‘Terry’, un hombre nacido en Richland Parish en el estado de Louisiana en Estados Unidos. “Por su carácter y su ética era un agente muy especial para nosotros” dijo Michele Leonhart, administrador de la DEA.

Watson era un agente especial del departamento de Justicia de la DEA y aún en estos momentos largas filas de carros se forman en Rayville para acceder a su funeral. Paul Watson, padre del agente, ha definido a su hijo como un excelente representante de la ley, “su amor por hacer carrera en la justicia llevaba muchos años, desde adolescente ‘Terry’ soñaba con este trabajo”, dijo el padre.

Por su parte, el director de la DEA Thomas Harrigan afirmó: “Él dedicó su vida a reforzar la ley y creía en la justicia, no solo para hacer de Estados Unidos un mejor lugar, sino para hacer de Colombia un mejor lugar”.

Su carrera

James Watson tenía un título en justicia penal de la Universidad de Louisiana. Mientras realizaba sus estudios, Watson trabajó como oficial de patrulla y más tarde como investigador de narcóticos en la oficina del Alguacil de Richland Parish.

Pero el gusto por impartir ley y orden no era exclusivo de ‘Terry’, era una pasión que corría por las venas de su familia. Su hermano, Scott Watson, también construyó una carrera en la justicia y actualmente es teniente del departamento de pesca y vida silvestre del Estado de Louisiana.

Antes de trabajar para la DEA, el agente colaboró en el ejército de los Estados Unidos y se ofreció como voluntario para ejecutar misiones en algunos de los sitios más peligrosos del mundo.

“Ser un agente de la DEA fue una meta alcanzada, pero él no estaba satisfecho solo con eso. Se ofreció como voluntario tres veces en Afganistán y como voluntario en Suramérica”, aseguró su familia. “Era un hombre de riesgos y retos, por lo que aceptar misiones tan complicadas era parte de su carácter y demostraba el tipo de persona que era”, aseguró con orgullo su madre, Henrietta Watson.

Faceta personal

La familia ha descrito a ‘Terry’ como un hombre apasionado que murió sin disfrutar una de las etapas más bellas de la vida. “Nuestro hijo estaba recién casado, en el mismo país donde perdió la vida conoció el amor. Se casó con Fadia luego de conocerla mientras trabajaba en la DEA en Colombia”, afirmó el padre del agente, “ella era el amor de su vida”, agregó.

Cuando ‘Terry’ regresaba a Richland Parish, pasaba gran parte de su tiempo acompañando y consintiendo a su abuela, Pauline, quien quizás fue la persona que más influencia tuvo en la vida del hombre de 42 años.

“‘Terry’ dedicó su vida al servicio público y a convertir el mundo en un mejor lugar. Nunca desperdició un solo segundo de su tiempo y nunca se dio por vencido. Estamos tristes porque se fue, pero estamos orgullosos de su servicio y del tipo de persona que era” dijo la familia. “Siempre lo amaremos profundamente”, concluyó su padre.