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'EN LA OEA SE DARIA LA INTEGRACION DEL HEMISFERIO'

Entrevista: CESAR GAVIRIA TRUJILLO<BR>SECRETARIO GENERAL DE LA OEA

17 de julio de 1995

TERMINO EN HAITI LA ASAMBLEA DE LA ORganización de Estados Americanos. La 'Declaración de Montrouis -Una nueva visión de la OEA', ha sido elogiada como el relanzamiento del organismo, aunque algunos no están de acuerdo. En todo caso el ambiente fue de optimismo, como lo reflejan las siguientes opiniones del Secretario General.
SEMANA: Algunos análisis después de la Asamblea de la OEA, dicen que la Secretaría General se anotó un gran éxito, porque realmente le dio nueva vida a la organización. ¿Quépiensa usted con respecto a esas conclusiones ?
CESAR GAVIRIA: La Organización de Estados Americanos está viviendo una época nueva, fruto de una coincidencia de circunstancias, básicamente el fin de la Guerra Fría, la Cumbre de las Américas, el fin del lenguaje de confrontación entre Estados Unidos y América Latina, el éxito de las ideas sobre la creación de una zona de libre comercio, el reconocimiento por parte de Estados Unidos de que América Latina es crítica en términos económicos y no sólo políticos y estratégicos. Estos factores han hecho de la OEA una institución multipropósito, multilateral , que ofrece grandes posibilidades y que llegaría a ser la institución en la cual se daría la integración del hemisferio.
SEMANA: Y en términos prácticos ¿cuál es la línea por seguir?
C.G.: Viene una tarea que no es simple, porque si hoy el tema de la agenda está claro, en qué y cómo vamos a trabajar esos temas, con qué teorías y propósitos, tenemos que conseguirlo dentro de los mismos medios o recursos que la OEA tiene. Hay que hacer una reorganización interna de la OEA, una renovación, que permita que la OEA pueda afrontar todas estas nuevas tareas y demostrar que está en capacidad de hacerlo dentro de sus limitados recursos. Pero hace falta llevar a la práctica todas estas situaciones conflictivas y difíciles, porque los temas de medio ambiente, o de derechos humanos, o de democracia, o de comercio implican terrenos donde de manera natural se dan controversias, no consensos
SEMANA: ¿ Cómo ve a América Latina?
C.G.: La veo supremamente bien, es la región que más está creciendo y que va a crecer más después del sureste de Asia. Yo creo que se están dando las condiciones para que América Latina sea una región de rápido crecimiento, de arraigamiento de las ideas democráticas y no veo ningún nubarrón en el futuro del continente como un todo.
Desde el punto de vista político yo diría que si para alguna región del mundo no es válida la tendencia aislacionista que está prevaleciendo en Estados Unidos es para América Latina y el Caribe. Y no lo es porque éstos están obteniendo tal peso económico, sobre todo en comercio, que no importa qué tendencias prevalezcan en el país del Norte. Ya no se puede desconocer el peso de América Latina y el Caribe en el futuro de ese país.
SEMANA: A pesar de eso se sigue insistiendo en que Washington no tiene propósitos políticos.
C.G.: Eso es un poco equivocado. La integración o no de América Latina y el peso económico se medirán por los niveles de inversión extranjera, por los niveles de comercio. Eso es el verdadero peso. No creo que por el tipo de problemas o la capacidad de generar conflictos o noticias se pueda medir el peso de América Latina o el Caribe. Hay que medirlo por patrones positivos, eso va a depender de qué tanto crezca América Latina y su comercio, la capacidad competitiva de mantener la inversión extranjera.
SEMANA: ¿Qué hay del caso de Cuba?
C.G.: Yo lo que hice ante la Asamblea fue formular el problema de Cuba de una manera que fuera aceptable para los países, y que sirviera de marco para una acción futura de la organización. Para lo que fue la formulación del problema, hubo mucha aceptación. Lo positivo es lo que está ocurriendo en Estados Unidos, donde ya no se considera un tema intratable y aunque están empezando a surgir soluciones antagónicas, diferentes y contrapuestas, la gente piensa que el problema se puede resolver, y eso es lo importante.
SEMANA: ¿Usted no ve la reincorporación de Cuba a la OEA como un objetivo de Fidel Castro?
C.G.: Depende de qué visión tenga uno. Si uno quiere resolver el problema de Cuba en cuanto a su régimen, a su democracia o de libertades de naturaleza económica o si se tienen principios y odios que no se pueden resolver.
SEMANA: ¿Cómo ve el Seeretario General de la OEA la situación de Colombia?
C.G.: En general bien. Yo tengo una gran confianza en que el presidente Samper va a estar en la capacidad de atender las expectativas, de resolver los problemas de pobreza que se han generado en la sociedad colombiana, de atender a las ansias de paz que hay en la sociedad colombiana. Estoy muy contento de ver cómo por los esfuerzos del presidente Samper y de la Policía de Colombia se logró capturar al líder del cartel de Cali. Porque ello significa que el escepticismo que existía sobre Colombia en materia de narcotráfico se va a vencer y Colombia va a volver otra vez a la ofensiva, a mostrar que es el país que ha hecho más esfuerzos y sacrificios en la lucha contra el narcotráfico y eso hace esperar una visión más balanceada de parte de la comunidad internacional.