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| Foto: BBC

JUDICIAL

Detienen al exalcalde por 43 desapariciones en México

José Luis Abarca y María de los Angeles Pineda están vinculados con la desaparición de 43 estudiantes en el estado de Guerrero.

4 de noviembre de 2014

El exalcalde de la ciudad de Iguala, José Luis Abarca, y su esposa, vinculados con la desaparición de 43 estudiantes, fueron detenidos en Iztapalapa en un operativo desplegado por la Policía Federal de México, confirmó este martes el portavoz de la institución, José Ramón Salinas a través de Twitter.

Abarca fue detenido junto con su esposa, María de los Ángeles Pineda, en una casa de Iztapalapa que al parecer tenían alquilada. Según medios locales, la propietaria alertó a la Policía sobre la presencia de la pareja en la capital mexicana.

Según informa el diario El Universal, la captura se produjo gracias al operativo desarrollado por un grupo elite de la Policía Federal que buscaba a la pareja.

El que fuera presidente municipal de Iguala y su esposa han sido trasladados a la sede de la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia (Siedo), en México DF, donde prestan declaración, asegura el diario.

Los detenidos durante esta madrugada han sido acusados por la desaparición de 43 estudiantes y el asesinato de otras seis personas de Ayotzinapa hace más de un mes.

El pasado 26 de septiembre policías tirotearon en Iguala a alumnos de una escuela rural por órdenes presuntamente del entonces alcalde, José Luis Abarca, que permanecía prófugo junto con su esposa, María de los Ángeles Pineda, y el secretario de Seguridad de Iguala, Felipe Flores, considerados autores intelectuales de los hechos.

Esa noche murieron seis personas, 25 resultaron heridas y 43 jóvenes fueron detenidos y entregados al cartel Guerreros Unidos, que se encargó de su desaparición, de acuerdo con las investigaciones de la fiscalía general de México.

Por el caso hay más de medio centenar de detenidos que incluyen a policías de Iguala y del vecino municipio de Cocula, así como miembros del grupo criminal, incluido su líder, Sidronio Casarrubias, quien reveló que cada mes el cártel entregaba elevadas sumas de dinero al alcalde e incluso decidía quiénes se integraban a la corporación policial.