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La jueza federal Susan Bolton. | Foto: AP

INMIGRANTES

Entra en vigor una ley de Arizona "suavizada"

Desde la medianoche, en Arizona entró en efecto la ley SB 1070 que busca reglamentar la inmigración ilegal, pero lo hace sin sus aspectos más polémicos, y que han creado una ola de protestas entre la comunidad hispana de Estados Unidos.

Alianza BBC
28 de julio de 2010

Horas antes de que la ley entrara en efecto, la jueza federal Susan Bolton emitió un fallo en el que suspendía las provisiones de la ley que autorizaban a la policía a revisar la condición migratoria de personas "sospechosas" que hayan sido detenidas por alguna otra razón.

Además, dejó sin efecto el punto de la SB 1070 que exigía a los inmigrantes portar la documentación que los acredita como residentes legales, y el que declaraba ilegal que inmigrantes indocumentados soliciten empleos en espacios públicos, como suelen hacer albañiles y jardineros en estacionamientos de tiendas en EE.UU.

"Hay una sustancial posibilidad de que los oficiales arresten erróneamente a extranjeros residentes legales bajo la nueva ley", explica Bolton en un documento de 36 páginas, en el que advierte que "Arizona impondría un distinto, inusual y extraordinario peso en los extranjeros residentes legales que sólo el gobierno federal tienen la autoridad de imponer".

Sin embargo, desde este jueves y bajo las nuevas normativas de la SB 1070, seguirá siendo un delito el detener un vehículo para recoger a jornaleros diarios o que estos trabajadores se monten en el vehículo si hacerlo impide el movimiento normal del tráfico.

Por su parte, la gobernadora de Arizona, Jan Brewer, se mostró desafiante al declarar ante los periodistas que la decisión de Bolton es sólo una piedra en el camino. Lo mismo hizo el sheriff Joe Arpaio que ha anunciado una de sus célebres redadas para este jueves, informa la corresponsal de BBC Mundo para asuntos hispanos, Marcia Facundo.
Muestras de satisfacción

Frente al Capitolio de Phoenix, la capital del estado de Arizona, permanece montada una vigilia celebrando el fallo de Bolton como una conquista de los que defienden los derechos civiles en EE.UU.

Para los manifestantes el fallo de este miércoles es apenas un triunfo en la larga batalla para que se regularice la situación de millones de personas que viven en EE.UU. sin papeles.

En Washington, funcionarios del gobierno del presidente Barack Obama consideran que la jueza actuó "correctamente", dijo Hannah August, portavoz del Departamento de Justicia.

Según el dictamen de la jueza Bolton, "es muy probable" que el gobierno logre demostrar la inconstitucionalidad de esos aspectos de la ley durante el juicio por la demanda que el Departamento de Justicia ha presentado contra el estado de Arizona, con el argumento de que está usurpando funciones exclusivas del gobierno federal.

"Aunque entendemos la frustración de la gente de Arizona con el fallido sistema de inmigración, retazos (de leyes) de políticas locales y estatales interrumpirían seriamente el trabajo federal sobre inmigración y al final sería contraproducente", explicó August.

El vocero destacó los esfuerzos y los "recursos sin precedentes" que está dedicando el gobierno central a reforzar la seguridad fronteriza, como el envío de 1.500 soldados de la Guardia Nacional que serán desplegados a partir del 1 de agosto.

Grupos de defensa de los derechos de los inmigrantes también han expresado su satisfacción por la suspensión de algunos de los efectos de la ley SB 1070.

"Es incluso un poco más de lo que estábamos esperando", aseguró Maribel Hastings, portavoz de Americas Voice, un centro de diseño de políticas públicas de Washington que aboga por una reforma integral de las leyes migratorias.

"Obviamente hubiéramos querido que se bloqueara totalmente la aplicación de la ley, pero esto nos da esperanzas de que se pueda dilucidar favorablemente en los tribunales", dijo Hastings quien recordó que lo migratorio "no es cosa de tribunales".

Ley problemática

"Independientemente de esta decisión, la ley en sí misma es para nosotros problemática", dijo Maribel Hastings, quien recordó que queda por delante el juicio por inconstitucionalidad.

"El gobierno federal, y sobre todo el Congreso, deben finalmente impulsar una reforma de las leyes migratorias que eviten asuntos como el de Arizona, para no seguir dilucidando esto en tribunales" afirmó Hastings.

La jueza había escuchado la semana pasada los argumentos de las partes y se esperaba su decisión en cualquier momento.

Es posible que la protesta prevista para este jueves se transforme en celebración por lo que los activistas pro inmigrantes consideran una victoria.

"Trabajo complementario"

La SB 1070 fue aprobada por el parlamento estatal de mayoría republicana y sancionada en abril pasado por la gobernadora Jan Brewer, del Partido Republicano.

El gobierno estatal presentó una contrademanda argumentando que no usurpa sino "complementa" el trabajo del gobierno federal, mientras que aseguró que sus 15.000 oficiales de policía podrían ayudar al arresto de inmigrantes indocumentados.

Sin embargo, algunos funcionarios policiales locales han rechazado que se les adjudique responsabilidades migratorias y varios han presentado demandas contra la ley.

"Nosotros no debemos ser agentes federales", aseguró Arturo Venegas, ex jefe de la policía de la ciudad de Sacramento, California y director de la Iniciativa para Aplicación de la Ley, un grupo que busca vincular a las comunidades con las policías que les sirven.

Superada la expectativa judicial, ahora una de las incógnitas es cómo actuarán a partir de este jueves algunos alguaciles, como el famoso sheriff Joe Arpaio, quien ha dicho que seguirá revisando el estatus migratorio de los extranjeros que viven en el condado de Maricopa, Arizona.