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Luz María Arango y su hijo Alejandro Urrea Arango en los campos del Pozuelo. | Foto: Samuel Sánchez / El Pais de España

FÚTBOL

Un adolescente colombiano en contra de la FIFA

El futbolista de 16 años quiere poner en fuera de lugar a una de las organizaciones más poderosas del mundo.

30 de mayo de 2016

“Un niño contra la Fifa”, este es el título de un completo reportaje publicado por el diario El País de España que narra la historia que ha tenido que vivir Alejandro Urrea Arango, un joven colombiano de 16 años quien es el protagonista de un lío jurídico en España.

La historia de este menor de edad proveniente de Medellín es tan impactante como insólita. Llegó a España para vivir con su madre, Luz Arango Uribe. Ella lo convenció de las bondades de habitar Pozuelo (Madrid), uno de los municipios con mayor renta media de España.

Hasta ese momento todo marchaba bien. Se inscribió a la escuela Everest y quiso hacer lo propio en el equipo de fútbol juvenil de esa región, ahí inició su drama.

El diario cuenta que al joven Alejandro, el equipo le hizo el reconocimiento médico y lo admitieron. “Se preparaba para jugar cuando la Real Federación de Fútbol de Madrid (RFFM) rechazó su ficha con el argumento de que incumplía el artículo 19 del Reglamento de la FIFA sobre Transferencia de jugadores, puesto que todo menor extranjero debe aportar “contrato de trabajo del padre y de la madre debidamente firmado”.

Sin embargo los padres del joven Alejandro poseen una buena renta familiar que no les obliga a tener contrato laboral.

En un principio el joven y su madre consideraron que el tema no era relevante sin saber que por incumplir este artículo, “la FIFA penalizó al Barça, al Atlético y al Madrid, tres de las instituciones más potentes del fútbol, por fichar menores extranjeros sin justificar el trabajo de los padres”, se lee en la nota del diario español.

La madre de Alejandro no se dio por vencida y llevó su queja ante un juez de lo contencioso administrativo en España. Luego en enero presentó una reclamación ante el Consejo Superior de Deportes (CSD) del mismo país. Este órgano ordenó que se le entregara al joven su ficha con el argumento de que “tanto el reglamento de la RFEF como la Ley del Deporte coinciden en no exigir más que la residencia legal”.

En el fallo también se advirtió que la RFEF y el CSD están bajo la ley de España y no dependen del reglamento de la FIFA, “es una organización de carácter privado sometida al derecho suizo”.

El polémico artículo 19 fue creado por el máximo órgano del fútbol para evitar la explotación infantil. Aunque Alejandro pudo jugar con el equipo hasta el final de la temporada, el proceso sigue abierto y la RFEF apeló por lo que se espera un fallo definitivo. 

El tema no es de poca monta. “Hace 21 años, Jean-Marc Bosman, un modesto jugador belga, se amparó en el Derecho Internacional para derogar la normativa de la UEFA que restringía la movilidad de futbolistas profesionales. La Ley Bosman transformó la industria del fútbol. La batalla de Alejandro Urrea, el Bosman de Pozuelo, puede tener consecuencias análogas para los menores”, concluye la nota de El País.