Conocida como 'Lady Alqaida', esta pakistaní de 42 años es una celebridad entre los islámicos. Pero su imagen en Occidente es otra. Actualmente cumple una condena de 86 años en una prisión de Texas, Estados Unidos, por intento de homicidio y terrorismo.
Siddiqui pasó de ser una neuróloga con PhD graduado del Massachusetts Institute of Technology (MIT) a ser la mujer más buscada del mundo. Tras su captura, varios grupos islamistas han propuesto su intercambio por prisioneros estadounidenses.
Pero hasta ahora, el gobierno de Estados Unidos se niega a canjear, lo que ha desatado la ira de los yihadistas. Sobre todo en Pakistán, donde los ciudadanos han protestado pidiendo por su liberación y acusando al ejército estadounidense de torturar y capturar a Siddiqui sin justificación.
'Laydy Alqaida' llegó a las filas de la organización terrorista luego de los atentados del 11 de septiembre. Según informes, se divorció de su esposo y salió de EE. UU. junto con sus tres hijos porque creía que el gobierno de ese país secuestraba niños musulmanes para convertirlos al cristianismo. Una vez en Pakistán, contrajo matrimonio con uno de los gestores del atentado al World Trade Center, en Nueva York, ahora condenado en Guantánamo.
En el 2008, fue capturada en Afganistán con posesión de planos que mostraban puntos emblemáticos de Nueva York, como la Estatua de la Libertad y el Empire State, junto con instrucciones de cómo crear bombas, planes para realizar atentados a civiles y varias botellas de cianuro.
Durante el interrogatorio, Siddiqui logró tomar un rifle M16 y abrió fuego contra los soldados que la detenían. Estos dispararon y la hirieron en el estómago. Fue sentenciada en el 2010 tras su recuperación.
La doctora Siddiqui no ha matado a nadie. Por eso, la negación de un intercambio por parte del gobierno estadounidense ha generado polémica ya que, al parecer, el interés del Estado Islámico en la terrorista es más mediático que estratégico.