Home

Mundo

Artículo

| Foto: SEMANA

MUNDO

"La próxima vez que venga a Colombia será como presidente de Venezuela": Capriles

El candidato opositor de Chávez se reunió con la comunidad de inmigrantes de su país radicados en Bogotá y aseguró que –si llega al poder- no apoyará acciones de ningún grupo irregular en ese territorio.

Karem Racines Arévalo
9 de mayo de 2012

Henrique Capriles Radonsky, el candidato de la unidad opositora que enfrentará a Hugo Chávez Frías en las elecciones presidenciales de Venezuela, el próximo 7 de octubre, estuvo en Bogotá. Dijo que no había viajado a Colombia para reunirse con ningún político o expresidente, sino para atender y escuchar las necesidades de la comunidad venezolana que vive aquí.

La última vez que estuvo en Bogotá, en una visita relámpago hace un par de semanas, opositores políticos en su país afirmaron que se había reunido con empresarios venezolanos para buscar financiación para su campaña y se especuló que había buscado apoyo de políticos colombianos. A principios de año también se filtró una grabación de una reunión en la que participó el ex presidente Uribe con políticos de la oposición venezolana, pero en la que no participó Capriles.

"No conozco al expresidente Álvaro Uribe y no he venido a interferir en los asuntos políticos de Colombia. Las decisiones de lo que ocurra aquí es asunto de los colombianos, así como lo que ocurra en Venezuela será decisión del venezolanos".

Con los que sí se reunió fue con unos 600 venezolanos que acudieron a la reunión para escuchar sus propuestas políticas. Muchos de sus coterráneos que se encuentran en Colombia emigraron en los últimos años buscando unas mejores condiciones de vida, por eso los invitó a regresar si llega al poder. "Los invito a soñar en lo posible. Quien quiera regresarse, que prepare sus maletas para volver en 5 meses, y entre todos nos ocupemos de activar el aparato productivo, lograr un país más justo, más seguro y menos dividido. Las condiciones estarán dadas para que cada quien esté en donde quiera".

El candidato expuso algunas de las medidas que implementará si se convierte en el nuevo presidente de Venezuela, después de 13 años de mandato ininterrumpido del teniente coronel Chávez Frías.

Prometió la depuración y transformación del sistema judicial y penitenciario, junto con una transformación de las policías. Esto será una prioridad para hacer frente a la inseguridad personal y la violencia. Dejó muy claro que no apoyará ninguna acción de grupos irregulares que perjudiquen la paz de Colombia o de Venezuela. Se mostró en total desacuerdo con la primera de las misiones que le encomendó el presidente Chávez al recién conformado Consejo de Estado: sacar a Venezuela de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
 
En materia económica dijo que fomentará la inversión extranjera – incluyendo la colombiana- como una forma de reactivar la economía local e incentivar el retorno de talentos que han preferido irse de su país. Aseguró que no está entre sus planes privatizar la industria petrolera venezolana, sino más bien que su intención es utilizar el petróleo como una palanca para diversificar la economía. Dejar de depender exclusivamente de este recurso es una de sus metas, pero para lograrlo se concentrará en fortificar y despolitizar a PDVSA. "Nuestra industria seguirá siendo estatal pero dejaremos de regalar nuestro petróleo".

Se mostró dispuesto a flexibilizar el control de cambio de moneda extranjera y en contra de las limitaciones comerciales que esto genera. En este momento las transacciones en moneda distinta al bolívar tienen que ser autorizadas por el organismo gubernamental Cadivi, y para Capriles este tipo de instituciones "todopoderosas" son centros de corrupción: "La gente no denuncia porque le teme a las represalias".

También declaró que considera importante que su país regrese a formar parte de la Comunidad Andina de Naciones (CAN), y que desde esa plataforma se gestionen los negocios con Mercosur.

Sobre las misiones, programas sociales asistencialistas que el presidente Chávez ha implementado con éxito pero que también han sido condicionadas para quienes apoyen al presidente y a su partido PSUV, especialmente en época de contienda electoral, dijo que las continuaría pero reveló que la oposición adelanta un proyecto de ley para darle rango legal a estas iniciativas.
 
El proyecto está en la fase de recolección de firmas. Según dijo, la idea es evitar que quienes se suscriben a estos programas tengan que defender un color de partido para poder gozar del beneficio.

El innombrable

Durante su discurso ante sus compatriotas, y luego durante la rueda de prensa, el candidato se abstuvo de mencionar el nombre del presidente Hugo Chávez, estrategia que ha venido utilizando en la campaña, en la que busca evitar a toda costa confrontar con el mandatario.
 
Y aunque no pudo esquivar el tema de la enfermedad de Chávez, se limitó a repetir algo que ha dicho ya en otras ocasiones, que le desea buena salud y que espera que se recupere para poder competir contra él. "El candidato al que yo quiero enfrentarme en octubre es el actual Jefe de Estado de Venezuela, para que cuando ganemos le podamos mostrar cómo se gobierna un país sin necesidad de generar divisiones y violencia. Por eso le deseo salud y larga vida".

Añadió que no le gusta hacer especulaciones sobre el estado de salud del mandatario actual porque hay demasiadas contradicciones en el mensaje que el partido de gobierno intenta dar. "Nos dicen que está bien, pero debe estar en Cuba. Luego nos dicen que la condición es de cuidado y luego sale jugando bolas criollas".
 
Después de Colombia visitará países como México, Brasil y la Unión Europea. Precisó que la intención de este recorrido es contactar a las comunidades de compatriotas establecidos en esos sitios y solicitar apoyo para la veeduría del proceso electoral que se realizará, por mandato del Consejo Nacional Electoral, el 7 de octubre.

Este último señalamiento lo hizo Capriles en varias oportunidades, tanto en el encuentro con sus simpatizantes, como en la rueda de prensa. Dijo que personas del gobierno podrían estar "inventando alguna aventura" para intentar suspender las elecciones, por eso también su campaña está en procura de que esa estrategia no encuentre apoyo en la comunidad internacional.

"No creo que tenga tiempo durante la campaña de volver a visitarles, así es que la próxima vez que venga a Colombia será como presidente de Venezuela", puntualizó.