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Protesta de Las Madres de la Plaza de Mayo por los desaparecidos durante la dictadura militar en Argentina. | Foto: AP

ARGENTINA

Las Madres de Plaza de Mayo recuerdan el aniversario 35 de la agrupación

El 30 de abril de 1977, 14 mujeres se atrevieron a desafiar a la dictadura para exigir conocer el paradero de sus hijos desaparecidos.

30 de abril de 2012

Separadas por asuntos ideológicos, aunque unidas por el mismo dolor, las Madres de Plaza de Mayo recuerdan el nacimiento de la organización humanitaria al cumplirse este lunes 35 años de la primera vez que se reunieron para reclamar a la dictadura argentina por sus hijos desaparecidos.

"Estamos preparadas como novias, con alegría, con mucha emoción y con ganas de llorar también", destacó Hebe de Bonafini, quien preside la más radical de las dos organizaciones en que las Madres de Plaza de Mayo están divididas desde hace 26 años.

La dirigente dijo que hoy es "un día de felicidad" porque si bien "esta historia comenzó por el horror, después hay momentos en los que uno vuelve a ser feliz".

"Nosotras hicimos lo que cualquier madre haría por un hijo", dijo a su vez Mabel "Taty" Almeida, una de las titulares del sector más moderado de la organización humanitaria.

"Ninguna de nosotras decidió llevar un pañuelo blanco en la cabeza. Ninguna decidió ser una Madre de Plaza de Mayo, pero nos llevaron lo más preciado que tiene una mujer, que es un hijo", sostuvo.

Ambos sectores han organizado para este lunes una serie de actividades para conmemorar el 30 de abril de 1977, cuando 14 mujeres se atrevieron a desafiar a la dictadura para exigir conocer el paradero de sus hijos desaparecidos.

Además del primer golpe que sufrieron con la desaparición de sus hijos, las Madres soportaron estoicamente otro acontecimiento que las sacudió a finales de 1977: el secuestro de Villaflor, Esther Ballestrino y María Ponce, las tres fundadoras de la organización cuyos cuerpos fueron enterrados en fosas comunes e identificados en 2005.

Después de hacerse visibles en el mundo, en 1986, durante el Gobierno constitucional de Raúl Alfonsín, la agrupación se dividió en dos tras la aprobación de una ley de reparación económica a los familiares de los asesinados y desaparecidos y a quienes habían sufrido encarcelamiento y torturas por sus ideas políticas.

Mientras la Asociación Madres de Plaza de Mayo se negó a recibir el resarcimiento, las Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora dejaron en cada familiar de las víctimas la decisión de aceptarlo.

Un año antes habían celebrado conjuntamente las condenas a prisión perpetua recibidas por algunos jerarcas militares en el histórico Juicio a las Juntas.

Dos tremendos mazazos para la organización fueron la aprobación de las denominadas "leyes del perdón" a represores en 1986 y 1987, también durante el Gobierno de Alfonsín, y los indultos a implicados en la represión dictados en 1989 y 1990 por el entonces presidente, Carlos Menem.

La llegada en 2003 de Néstor Kirchner a la Presidencia del país, desde la cual impulsó la derogación de las "leyes del perdón", lo que derivó en la reapertura de cientos de causas contra agentes de la dictadura, reconcilió a las Madres con la política.

Ese alineamiento con el oficialismo se mantuvo durante toda la Administración de Kirchner (2003-2007) y aún hoy con el Gobierno de su esposa y sucesora, Cristina Fernández.

El año pasado, la agrupación que lidera Bonafini quedó en el ojo de la tormenta por una denuncia por malversación y desvío de fondos públicos destinados a un plan de viviendas sociales contra Sergio Schoklender, exapoderado de la Fundación Madres de Plaza de Mayo y mano derecha de la dirigente.

La causa judicial está en marcha y por ella el próximo 15 de mayo deberán declarar Sergio Schoklender, Alejandra Bonafini, hija de Hebe de Bonafini, y Pablo Schoklender, hermano del exapoderado, entre otros.

EFE