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Fernando Lugo, presidente de Paraguay, se declara recuperado del cáncer que le diagnosticaron el año pasado. | Foto: Foto: EFE.

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Lugo se declara recuperado del cáncer que le diagnosticaron en agosto pasado

El presidente de Paraguay regresó a Asunción luego de someterse a un tratamiento en Brasil.

28 de enero de 2011

El presidente de Paraguay, Fernando Lugo, que regresó este viernes a Asunción tras someterse a nuevos tratamientos en Brasil, expresó que se siente fortalecido y recuperado del cáncer linfático que le diagnosticaron en 2010.

"Les puedo asegurar (...) que ese mal, el linfoma no Hodgkin, está totalmente superado", indicó Lugo durante una breve rueda de prensa, tras su llegada al aeropuerto Silvio Pettirossi, a las afueras de esta capital.

Lugo retornó a Asunción tras recibir el alta médica en el Hospital Sirio-Libanés de la ciudad brasileña Sao Paulo, donde desde el miércoles se sometió a un control que demostró que el linfoma que padece está remitiendo, según un breve comunicado divulgado este por este centro médico.

"Paraguay se merece y desea tener un presidente sano, que se entrega enteramente a su nación y que en este momento lo tenemos", comentó el mandatario.

Agradeció "a la ciudadanía, a los médicos" y a los que "han tenido la suficiente paciencia para soportar a un gobernante que ha afrontado un mal y que hoy se encuentra totalmente rejuvenecido".

Al ser consultado sobre los próximos tratamientos que le prescribieron, el ex obispo católico detalló que le aplicaron una vacuna en el Sirio-Libanés y que cada dos meses, durante los próximos dos años seguirá recibiendo esa dosis.

"La pesadilla ha pasado a pesar de que todos saben que son células traicioneras que pueden volver, pero estamos tomando todas las precauciones", indicó.

Destacó que el medicamento que le aplicaron "elimina cualquier tipo de célula cancerígena que pueda aparecer".

Lugo fue sometido esta semana en Sao Paulo a ejercicios de fisioterapia destinados a tratar los efectos colaterales de la quimioterapia, que le provocó especialmente un aumento de peso, según las fuentes médicas.

El jefe de Estado, de 59 años, se trasladó el día 23 pasado pasado a esa ciudad brasileña para aprovechar una "breve pausa laboral" de cinco días en su gestión y someterse a "nuevos chequeos médicos".

Lugo, cuyo mandato de cinco años concluye en 2013, estuvo ingresado en reiteradas ocasiones en el Sirio-Libanés el año pasado debido a su tratamiento, lo que no le impidió seguir al frente del Ejecutivo paraguayo.
 
EFE